Un duelo a cara de perro por la Copa

El Unicaja comunicó ayer su primer positivo de la temporada (hoy se conocerá de quién se trata por su ausencia en la rotación) y el Valencia viene lidiando de forma más prolongada con los contagios. Primero, un brote a mediados de diciembre, después los casos puntuales de Hermannsson, que vuelve hoy, y Dimitrijevic, que será baja en Málaga junto a Claver, tocado en el pie izquierdo. A ello se suma el hecho de que el Valencia vuelve a competir en la Liga diecisiete días después de su triunfo ante el Monbus Obradoiro tras el aplazamiento de sus últimos dos partidos por sendos positivos de sus rivales y que están sin fecha: la salida a Tenerife y el choque en casa ante el Herbalife Gran Canaria.

Con 8-6 de balance, el Valencia aún podría permitirse la derrota este mediodía, si no falla ante los rivales canarios. Curiosamente su 'basket average' es de +47, sólo un punto más que el del Unicaja después de esa clara victoria del martes ante el Casademont Zaragoza (112-72) que le da más 'chance' aún cara a hipotéticos empates finales a nueve victorias. Pero para ello el cuadro malagueño ha de mejorar y mucho su imagen de toda la temporada, en la que apenas ha podido con rivales que juegan en torneos europeos.

Fotis Katsikaris elogió el juego interior de su rival, con Pradilla, Tobey, Rivero, Labeyrie y Dubljevic, mientras que Joan Peñarroya, que fue candidato al banquillo local, la batería exterior cajista: «Podríamos nombrar a muchos que tienen esa capacidad individual de generarse puntos y siempre están ahí en todas las estadísticas como jugadores importantes».

No hay posibilidad de fallo para el Unicaja. Hoy o el miércoles (en Bilbao) se podría certificar su adiós a la Copa o, en el mejor de los casos, habrá que esperar al desenlace en otras canchas antes del día 30 para saber si las nueve victorias le dan para el objetivo.