Primera reválida para el nuevo proyecto del Unicaja

Es sólo el arranque de la temporada, pero qué mejor reválida para este proyecto que un duelo ante el Real Madrid (12.30 horas, Movistar Deportes, dial 59), un gigante con altas prestaciones en todas las facetas del juego. Los triples de Llull, el notable alto asegurado de Deck y Yabusele en el 'tres' y el 'cuatro', la intimidación más absoluta de Tavares y el acierto anotador de Musa, el MVP de la última Liga Endesa. Por no hablar de la fiabilidad de Causeur, el poderío físico de Poirier o la nueva incorporación de Cornelie.

Argumentos para abrumar a un Unicaja que, sin embargo, ha demostrado en los últimos tiempos que suele crecerse y acercarse a su mejor versión en este tipo de partidos, máxime si va a disponer del factor clave de un Martín Carpena lleno (quedaban 40 entradas a la venta horas antes de la cita) y se comprueban los últimos precedentes: 91-92 en el último cruce en Málaga y un 73-75 ante el Barça semanas antes. A eso se le suma el desgaste mayor en el Real Madrid, que compitió el jueves en Atenas ante el Panathinaikos en el inicio de la Euroliga (68-71) .

«Esperamos al mejor Unicaja. Siempre que vas a Málaga es una cancha complicada. Hay mucha presión ambiental y la afición aprieta mucho. Tenemos que ir con toda la concentración del mundo para jugar un partido exigente, que nos requerirá mucho esfuerzo y ser capaces de perder pocos balones», reconoció ayer el nuevo entrenador blanco, un Chus Mateo que ya dirigió al Unicaja entre 2011 y 2012 (además de tres campañas como ayudante de Scariolo) y que está invicto al frente de los blancos. Ganó cuando suplió a Laso en varias citas de la pasada campaña, conquistó la Supercopa Endesa tras batir al Betis (69-100) y al Barça (89-83), y no ha perdido en la Liga ACB: 88-94 en Gerona y 93-79 al Monbus Obradoiro.

Más que nunca el Unicaja se verá exigido en todos los capítulos, pero tiene efectivos para sostenerse en la pelea hasta el último momento. Dos de la docena de guerreros a las órdenes de Ibon Navarro, Barreiro (2015) y Lima (2015-16), fueron del Real Madrid, y Kalinoski y Musa compartieron plaza en la batería exterior del último Breogán. Ambos clubes presumen también de dos de los mayores talentos de futuro del baloncesto nacional, Mario Saint-Supery y Hugo González, aunque todo indica que ninguno jugará. El malagueño es el decimotercer hombre de la plantilla, y el madridista, que ya ha debutado en esta Liga, puede verse relegado por el regreso de Abalde, la principal novedad visitante. Los blancos tienen, eso sí, las bajas de Alocén, Rudy Fernández y Hanga.