El Unicaja, a por el 'pleno al quince' en su vuelta a un lugar mágico: Badalona

Al tiempo que Ibon Navarro reflexiona a nivel casi filosófico sobre el valor edificante de las derrotas e insiste en que habrá que conjugar tarde o temprano el verbo 'perder', el equipo se ha acostumbrado a ganar y se probará de nuevo ante un Joventut renovado y más cansado, en tanto que viene de jugar en Londres el miércoles (80-82) en la Eurocup.

Fuera de la Copa del Rey, sin que el club tenga una situación económica boyante, aunque mejor que la que en 2018 amenazaba con la disolución de un histórico, casi todo han sido problemas este curso: bajo rendimiento de Onuaku y de Deshaun Thomas, ya rescindidos y que eran dos de las principales apuestas, la lesión de tobillo de Feliz y su sustitución provisional por Chery y la baja actual de Vives. Además, el ala-pívot Tyler Cook es duda por unas molestias musculares en la pierna derecha.

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En todo caso, no se prevé un partido tan plácido como aquel 113-91 de la primera vuelta, cuando el Unicaja estrenó su casillero de victorias. El Joventut se ha reforzado recientemente con un anotador consumado en la ACB como Shannon Evans (aunque no funcionara en el Valencia) y es una mezcla de experiencia (los Pau Ribas, Brodziansky y Tomic) y juventud, la de los Busquets, Jordi Rodríguez, Kraag, Ruzic y Prey.

En la Eurocup (cuarto de su grupo y ya en los 'play-off') le luce todo más al cuadro catalán, con igual número de victorias y derrotas (nueve) en la Liga Endesa. La dirección de Andrés Feliz (13,6 puntos y 4,4 asistencias para 15,4 de valoración), los puntos de Andrews (13,8), el tiro exterior de Brodziansky (39,4%), un 'cuatro' que saca de zona a su par, y los movimientos de Tomic son la principal amenaza verdinegra. No debería ser suficiente ante la versión más reciente del Unicaja, a poco que se dé la intensidad y el ritmo ofensivo a que acostumbra. Eso sí, el calendario se empina. Habrá nuevo partido el miércoles (llega el Tofas Bursa al Carpena en el inicio del 'Top 16' de la BCL) y ya habrá que jugar siempre cada tres días.