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El Unicaja se resiente lejos del Martín Carpena. La derrota ante el Casademont Zaragoza ha confirmado que el conjunto cajista ha perdido la solidez que ... le caracterizaba y que atraviesa por un bache de juego después del título de la Copa del Rey. El subidón emocional ha dado paso a una relajación. Sólo así se pueden entender encuentros como el del sábado, en el que los de Ibon Navarro estuvieron muy lejos de lo que acostumbran a nivel de intensidad y actitud.
Se da la circunstancia de que el equipo lleva más de dos meses sin ganar un partido lejos de Málaga. La última victoria fue en la pista del Surne Bilbao el 11 de enero. Es cierto que por medio estuvo la Copa y el parón de las selecciones, pero es poco habitual, al menos en los dos últimos años, una situación como la actual. Perdió ante el Girona, también en la cancha del Río Breogán y ahora en Zaragoza. Llaman la atención esos dos primeros tropiezos ante equipos de la zona baja. A estas derrotas se une la encajada en Estambul contra el Galatasaray, así que ha perdido en sus cuatro últimos desplazamientos.
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Para entender la situación actual, es válida la comparación con la temporada anterior, cuando el Unicaja sólo perdió cuatro encuentros en toda la fase regular. Ahora acumula cinco, pues también cayó en la visita al Real Madrid, precisamente su próximo rival en Málaga. Esta serie de malos resultados lo ha alejado de la pelea por el primer puesto, al menos de forma momentánea.
Pero más allá de esas cuatro derrota seguidas entre Liga y Champions, es evidente que el equipo no está fino. En sus últimos encuentros fue siempre a remolque y sacó algunos adelantes con remontadas muy trabajadas. Pasó contra el Rytas, Granada, Manresa y Galatasaray (en Málaga). En esos partidos estuvo el 60% de los minutos por detrás en el marcador y en el caso del choque contra el equipo turco sólo fue por delante en los últimos dos y medio.
En estos resultados puede haber tenido que ver también la entrada en escena del Top-16 de la Champions. Al contrario que en meses atrás, ahora la competición europea se juega cada semana, aunque no es una carga de partidos excesiva, pues es lo habitual en la Eurocup y por debajo de la Euroliga, en la que son frecuentes las semanas con jornadas dobles. La próxima visita al Manisa, uno de los peores equipos de la Champions, puede ser una buena oportunidad para poner fin a esta racha de malos resultados lejos de Málaga (martes 18.00 horas), aunque conviene estar en alerta porque el conjunto turco llega al choque después de sorprender la semana pasada con una inesperada victoria ante el Rytas.
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