El Unicaja, con paciencia en el mercado

El Unicaja prefiere esperar. El club malagueño aguardará situaciones más ventajosas en el mercado para terminar de retocar una plantilla que está casi perfilada después de los últimos fichajes que realizó a mitad de esta misma temporada.

El mercado ya se está moviendo, pero todo el mundo va con pies de plomo ante el incierto panorama económico que puede dejar la crisis del coronavirus. Habrá reducciones de presupuesto, los contratos que se firmen serán más bajos y habrá jugadores importantes que tendrán que rebajar su caché. El club malagueño está al tanto de todo esto y no tiene prisa por fichar porque tiene los deberes hechos. Un representante era muy elocuente días atrás cuando se le preguntaba sobre la posibilidad de que alguno de sus jugadores acabe en Málaga la próxima temporada. «Ahora mismo están fuera del mercado», resumía. Es cierto que el presupuesto del Unicaja también puede resentirse, pero seguirá siendo muy competitivo.

Efectivamente, son días de escuchar y valorar alternativas para no errar en los elegidos que apuntalen una plantilla que es muy interesante tras las llegadas de Brizuela, Bouteille, ambos con contratos largos, y de Mekel y Simonovic hasta el final de la temporada.

Tampoco tiene prisa el Unicaja porque no realizará demasiadas incorporaciones. Habrá dos fichajes, quizás tres, y hay algunas dudas sobre los que a día de hoy finalizan contrato. La tranquilidad del Unicaja se pudo apreciar en que, aunque sondeó el regreso de Kyle Wiltjer, no le trasladó una oferta para competir con lo que le ofrecía su actual equipo, el Turk Telekom. Vio su disponibilidad, pero no consideró que hubiese que tirar la casa por la ventana por un jugador que ya estuvo la pasada campaña en Málaga. Wiltjer firmó un gran contrato en Turquía, y, el Unicaja, a otra cosa...

Parece que los principales movimientos pueden llegar en las posiciones interiores. Ya trascendió el interés por Jacob Wiley, con el que, de momento, no ha habido nada más que eso. La duda ahí es qué fichar, si un cuatro o un cinco. La clave estará en la reubicación de Deon Thompson, pues su salida es inviable al tener un buen contrato firmado para la próxima temporada. «Los jugadores que tengan algo seguro no se van a mover», insistía otro agente a SUR.

Así que el Unicaja está ahora escuchando. Las distintas agencias de representación están mandando sus famosos listados y algunos ofrecimientos son muy interesantes. Sin embargo, los precios de algunos jugadores están ahora fuera del alcance del Unicaja. Quizá dentro de un mes, la situación variará y lo que ahora es caro, pasará a ser barato. No hay prisa.

Tampoco conviene perder de vista que quizá se opte por lo conocido. Como ya se informó semanas atrás, el Unicaja vería con buenos ojos la continuidad de Gal Mekel en el equipo y así se le ha comunicado a su agente. En este caso, tampoco hay nada más allá de ese interés. Un caso particular es el de Waczynski, que también acaba contrato. El club valora el paso adelante que dio en plena plaga de lesiones y el hecho que se haya adaptado al rol que quería Casimiro, que incluso lo destacó en alguna comparecencia pública. Si alguno de los ofrecimientos que también han llegado para este puesto no lo mejora, el polaco seguirá en Málaga a una temporada más, previa rebaja de su sueldo, algo que el polaco tiene asumido.

En otras situaciones, el Unicaja esperará a que acabe la temporada para tomar una decisión, aunque parece difícil que jugadores como Ejim o Elegar continúen en el equipo, toda vez que tampoco han contado demasiado para el entrenador. Con respecto al técnico, su situación no ha cambiado a lo que se informó la semana pasada. Su futuro se abordará cuando acabe la temporada, aunque lo tiene todo a favor para seguir en Málaga.