El Unicaja afronta hoy otra final en ese nuevo escenario de competición que tiene por delante en el próximo mes. Asegurar una plaza europea para la próxima campaña es el objetivo esencial y clave para el club cara al futuro y esta noche tiene un ... encuentro realmente complicado en la pista del Joventut (20.45 horas, Movistar Plus). El choque llega tras la debacle de la pasada semana ante el Lenovo Tenerife, con ese doloroso -33 ante los aficionados malagueños, así que por orgullo y por cuestiones deportivas, la plantilla cajista está obligada a una reacción.
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Acabar décimo certificaría la plaza europea, aunque podría haber alguna opción más en el reparto para la próxima campaña debido al conflicto ruso. Además del Unicaja, el Río Breogán y el Bilbao también tienen la misma meta, por lo que cada victoria es clave. Esta jornada, el equipo gallego recibe a un Casademont Zaragoza, que se juega la vida, y el cuadro vasco juega en casa ante el UCAM Murcia, que pelea por una de las dos plazas de 'play-off' que quedan por definirse.
Son encuentros difíciles, tanto como el que el Unicaja juega en el pabellón Olímpico de Badalona. Delante tendrá a un rival herido por su inesperada eliminación en la Eurocup. El conjunto que dirige Carles Durán era uno de los favoritos al título y acabó la fase de grupos como líder, pero firmó uno de los peores encuentros de la temporada el miércoles ante el Ulm y se quedó fuera de los cuartos de final.
Está por ver cómo reacciona el Joventut al revés europeo dentro de lo que, al margen de esto, es una gran temporada, pues es quinto en la Liga con 19 victorias y ahora su objetivo es hacerse con una de las cuatro plazas de cabeza de serie para la fase por el título.
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Se trata de un equipo que está haciendo un gran baloncesto, con muchas alternativas en su juego y que tendrá ahora que superar la ausencia de un jugador importante como Brodziansky. Los veteranos Ribas y Vives dominan una línea exterior en la que esta campaña irrumpió el dominicano Andrés Feliz. Joel Parra y Derek Willis aportan una gran actividad y capacidad de rebote, mientras que Tomic aparece amenazante ante el irregular juego interior cajista.
Después de no haber podido encontrar un refuerzo de urgencia, el Unicaja tendrá que recomponer la plantilla reubicando piezas por las ausencias de Suárez y Abromaitis. La prueba ante el Tenerife fue un desastre, pero más por falta de actitud que por otro motivo.
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