Partido horrendo del Unicaja ante el Dijon (78-68)

El Unicaja tenía la oportunidad de encarrilar el pase a la siguiente fase, pero por lo visto en su puesta en escena, profirió dejarlo para otro día. El cuadro cajista salió a dos por hora a la cancha y el Dijon, con sus limitaciones y sus bajas, algunas importantes, ganaba 11-5 después de tres minutos. La entrada de Brizuela por un apático Fernández le dio algo más de mordiente al ataque cajista, pero la defensa de los de Katsikaris era muy mala, especialmente en las acciones de bloqueo y continuación, y los rivales anotaban con facilidad debajo del aro. Después de haber logrado tres triples, el Unicaja perdía 21-15 al final del primer cuarto. Loum y Ware, los dos pívots del Dijon, se combinaron para anotar 14 de los 21 puntos de su equipo. El problema del cuadro malagueño estaba identificado.

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Los dos primeros triples, no tenía otra fórmula para anotar, hicieron pensar que el Unicaja podría cambiar la dinámica del partido. Nada más lejos de la realidad. Los siguientes diez minutos fueron un mano a mano sonrojante entre Holston y Ware. Las penetraciones y asistencias del primero, junto al martilleo constante del segundo desarbolaron a la defensa del Unicaja. Eric era incapaz de frenar a Ware, que campaba a sus anchas, y Holston superó a todos los defensores que Katsikaris le colocó encima (Díaz, Cole, Fernández y Brizuela). Como en ataque el Unicaja sólo buscaba acciones individuales con ausencia de elaboración, le resultaba imposible sacar partido, pues sus hombres no podían ganar en el uno contra uno. La renta del Dijon no paró de crecer hasta el 47-32 con el que se llegó al descanso.

Tenía muchas cosas que corregir el Unicaja después de 20 minutos de un baloncesto horrendo. Hubo propósito de enmienda, pero fue algo fugaz. Un parcial de 3-12 le permitió volver al partido con Brizuela como estilete. Coincidió la reacción con la ausencia en la pista de Holston y Ware, los mejores del rival. Pero el cuadro francés tenía claro que debía atacar por dentro y el veterano Alingue hizo un destrozo grande debajo del aro. Ocho puntos seguidos del pívot del Dijon permitieron a su equipo enfilar el último cuarto ganando 60-49.

El regreso de Holston y la continuidad de Alingue acabó con las opciones de un Unicaja descompuesto. Las canastas seguían llegando con total facilidad por parte de los pívots locales. Loum también se sumó a la fiesta finalizando varias asistencias de Holston. El average no peligraba después del claro triunfo logrado en Málaga, pero la clasificación directa para la siguiente fase tendrá que esperar después de un partido horrendo.