El Unicaja, ante la necesidad de un triunfo tranquilizador ante el Betis

Para el conjunto de Ibon Navarro es muy importante aprovechar esta parte más accesible del campeonato (Betis, Granada y Obradoiro) para meterse en los puestos que dan opción a jugar la Copa del Rey que se celebrará en Badalona. El Unicaja sólo ha ganado dos partidos hasta ahora y llega después de perder los dos últimos. Duodécimo en la clasificación precisa de un impulso que también mejore las sensaciones que ofrece su juego.

La insistencia en el triple, los malos porcentajes, las pérdidas y la irregularidad de varios jugadores hacen que el equipo malagueño todavía no tenga un estilo identificable. Esa irregularidad se ha traducido principalmente en un mal ataque, el tercero peor de la Liga Endesa. De momento, su sólida defensa le ha permitido competir siempre, pero si no mete es complicado ganar partidos. De momento, sólo suma dos victorias, de ahí que sea crucial ganar hoy en el primero de los dos derbis seguidos en casa.

Delante tendrá a un rival que tiene en sus filas al que hasta ahora es el mejor jugador del campeonato: Shannon Evans. El estadounidense es el máximo anotador de la Liga, líder en asistencias, recuperaciones y valoración. Sobra decir, que para el Unicaja es vital minimizar el gran impacto que tiene en el juego de su equipo, así que ahí tendrá mucho que ver Alberto Díaz. Más allá de Evans, el conjunto que dirige Luis Casimiro, es limitado. BJ Johnson (13 puntos y 6 rebotes) es el único que acompaña al base en la parcela anotadora, pues ningún otro de los jugadores béticos promedia más de 8 puntos. El Unicaja es notablemente superior en el juego interior, pero tendrá que demostrarlo, porque hasta el momento no ha explotado el potencial de sus pívots.

El conjunto malagueño llega al partido después de una semana en la que Tyson Carter, su jugador más en forma, ha sufrido un virus intestinal, y con Brizuela y Kravish con algunas molestias físicas de no demasiada gravedad.