El Unicaja, ante un duelo crucial

El Unicaja que lidera su grupo en la Eurocup es duodécimo en la Liga Endesa y nadie quiere pensar en que esté en la Copa del Rey como equipo anfitrión en lugar de lograr la plaza a por méritos deportivos. Sería un borrón demasiado grande para un equipo al que se le presume un potencial mayor del que está ofreciendo.

En este ambiente de inestabilidad, aparece un recién ascendido como el Bilbao que es una de las revelaciones hasta el momento en la Liga Endesa. Es séptimo con una victoria (5) más que el cuadro cajista. El equipo que dirige Álex Mumbrú llega al choque después de derrotar al líder, el Real Madrid, en un partido de máxima tensión y en el que jugó un gran baloncesto. Así que el Unicaja debe andarse con cuidado, porque un tropiezo complicaría más todavía su situación en la Liga y sería difícil de digerir por sus aficionados.

El Unicaja tendrá una oportunidad más para tratar de mejorar en su gran déficit de esta temporada, la parcela ofensiva. Tiene el peor ataque de la Liga (74,2), el peor porcentaje de tres (30,4) y es el equipo que menos asistencias promedia (13,2. Los datos son contundentes y dejan claro cuál es su problema. Por mucho que su defensa sea la segunda mejor da la Liga, las carencias ofensivas le impiden progresar y, por lo tanto, ganar partidos. El hecho de jugar en casa y de que los jugadores hayan sido 'alertados' sobre la importancia del partido, le hará jugar seguramente con un punto más de insistencia que en los últimos partidos, otra cosa será que estén más acertados.

Pese a su condición de recién ascendido, el Bilbao aparece en puestos de privilegio en algunos de los principales apartados estadísticos. Con 84,6 puntos es el quinto mejor ataque y es cuarto en rebotes.

El francés Axel Bouitelle, al que el Unicaja ya se enfrentó la pasada campaña cuando militaba en el Limoges, está firmando un excelente comienzo de temporada y con 18 puntos de media es el máximo anotador de su equipo. Con un gran lanzamiento de tres y capacidad también para penetrar, es clave que el cuadro malagueño logre frenarlo. Junto a él, el estadounidense Jaylen Brown y el pívot checo Ondrej Balvin, al que Casimiro conoce perfectamente pues lo entrenó en Sevilla y Las Palmas. Rafa Martínez y el ala-pívot lituano Kulboka, completan una rotación muy interesante, que además tiene nacionales jóvenes a los que Mumbrú está sabiendo dirigir con acierto.