El Unicaja busca la redención para no quedarse en tierra de nadie

Aunque la salvación ya está virtualmente amarrada y pueda parecer que el encuentro de hoy no tiene demasiada trascendencia, la realidad es que el Unicaja se juega mucho ante el Andorra. Entre los pocos objetivos que le quedan al equipo que dirige Ibon Navarro está el de asegurar una plaza europea cara a la próxima temporada. Como se explicó ayer, el Breogán, que es décimo, es el equipo que cierra estos puestos, por lo que el Unicaja tendrá que enjugar la ventaja que tiene el cuadro gallego.

Como es lógico, cada partido en casa será crucial y si el equipo quiere pelear por ese último puesto europeo, está prohibido perder en el Palacio de los Deportes. Será interesante ver cómo recibe el público a unos jugadores que están siendo una decepción esta temporada, aunque no se espera una entrada importante por la coincidencia con distintos actos procesionales de Semana Santa. Es previsible que Jaime Fernández se reincorpore al equipo después de dos meses de baja, por lo que Ibon Navarro tendrá que realizar un descarte. El joven Yannick Nzosa tiene muchas opciones de quedarse fuera de la convocatoria.

Si el rendimiento del Unicaja está por debajo de lo esperado, el caso del Andorra es similar. El conjunto del Principado tiene un presupuesto importante y favorecido por una situación fiscal ventajosa, pero no consigue escapar de los puestos de peligro en la Liga Endesa. El conjunto que dirige David Eudal desde la destitución de Ibon Navarro es cuarto por la cola bordeando los puestos de descenso. De hecho, antes del choque tenía las mismas victorias, ocho, que el Zaragoza, que es penúltimo y ayer perdió con el Betis. Por contra, el Andorra sí está cumpliendo en la Eurocup, en la que ha sido cuarto del grupo A (10-6) y se medirá Buducnost en el 'play-off' que arranca el 19 de abril. Como se puede comprobar, dos frentes distintos para el rival del Unicaja.

Pese a su pobre rendimiento en la ACB, el Andorra tiene un perfil incómodo para el unicaja, con una plantilla de buen nivel atlético, de esas que se le atragantan al cuadro cajista. El regreso de Jelinek hace unas semanas ha dado más estabilidad y acierto exterior a un equipo en el que Hannah y especialmente Miller-McIntyre –uno de los mejores asistentes de la Liga– llevan el peso de la dirección. El belga Yannick Franke ha llegado como refuerzo para cubrir la baja eterna de Gal Mekel, al que el Andorra ha cortado esta semana después de haber encadenado varias lesiones, tal y como le pasó en Málaga. Paulí, Crawford y Jelinek completan una línea exterior peligrosa. Quizá el punto débil del Andorra está en el juego interior, aunque tiene efectivos de sobra y de distinto perfil como Olumuyiwa, Diagné, Arteaga, Morgan o el francés Noua.

La posición del Andorra en la tabla no es fruto de la casualidad. Tiene el tercer peor ataque de la Liga, es el segundo en pérdidas y el quinto peor en triples. El cambio de Ibon Navarro por su asistente, Eudal, le hizo ganar dos partidos (Madrid y Joventut), pero en los últimos dos meses sólo ha ganado uno de los seis partidos que ha jugado.