El Unicaja, ante un duelo crucial en plena crisis

La gran incógnita es ver cómo responderá el Unicaja después de todo lo que está pasando y tras dos semanas de parón. Los jugadores han estado muy pendientes de las informaciones publicadas en SUR sobre las dificultades económicas a las que se enfrenta el club. Katsikaris ha sido clave en este tiempo tratando de mantener la concentración en lo importante que es el partido, pero los profesionales son muy inestables en este tipo de situaciones. La temporada del Unicaja ha estado plagada de sobresaltos de todo tipo y eso se ha apreciado también en el rendimiento del grupo en varias ocasiones.

Por otro lado, está por ver cómo vuelve el equipo a la competición. Se esperaba que estas dos semanas sirviesen para recargar fuerzas para el decisivo tramo final, pero las complicaciones físicas no han desaparecido. Mekel se perdió varios entrenamientos y Nzosa, jugador clave hoy en día para el equipo, es baja por unas molestias en el adductor de la pierna izquierda. Katsikaris ha tratado de reservar al máximo al congoleño teniendo en cuenta la importancia que tiene en sus esquemas, pero no ha llegado. Al menos sí que recupera a Carlos Suárez después de dos meses lesionado, desde la Copa.

Delante habrá un equipo muy complejo como el Morabanc Andorra, a pesar de las notorias bajas por lesión que tiene. Desde hace semanas no puede contar con Tyson Pérez, Dime, Gielo y Diagné, este último desde que comenzó la temporada. El jueves trascendió la gravedad de la lesión de tobillo del finlandés Palsson y, ayer, dos positivos por coronavirus en un jugador y en un miembro del cuerpo técnico. Como se puede comprobar, la lista de problemas del Andorra es larga, pero en una situación parecida llegó el Burgos a Málaga hace dos semanas y acabó ganando en el Carpena...

Los peligros del Andorra están perfectamente identificados. A pesar de todas sus bajas, mantiene el pulso competitivo gracias al buen momento de Clevin Hannah, que promedia 13 puntos por partido, pero que en los últimos cinco anota una media de 20. Junto a él, los otros manejadores del juego andorrano son Senglin y Jelinek, así que la defensa exterior del Unicaja será clave.