Resaca y Marcelinho

El Tenerife a pesar del presumible cansancio y las bajas de Guy, Doornekamp y Jaime Fernández saltaba a la cancha con mucha más energía y la lección bien aprendida, apretando a los árbitros, con mucha de actividad por parte de Cook, produciendo mucho para su equipo, dominando claramente el rebote y anotando con demasiada facilidad, lo que les permitía dominar ampliamente el marcador gracias a también a los malos porcentajes del Unicaja en el grito de tres puntos.

El Equipo malagueño mejoró defensivamente en el segundo cuarto, lo que le proporcionó más puntos en contraataque y transición, y que de la mano de Djedovic y de Carter, que anotaba 10 puntos en este periodo, se acercó en el marcador, a pesar de que su equipo mantuvo el desacierto desde la línea de tres puntos, con un Osetkoswki que ya acumulaba en el primer tiempo un inhabitual 0 de 5.

En el tercer cuarto vimos al mejor Unicaja, gracias al acierto desde el triple de Kalinoski Kravish y Barreiro, que le permitió abrir el campo, jugar con más espacios y que Osetkoswki apareciera más en su faceta anotadora en situaciones más cercanas al aro dándole el relevo a Carter para a ponerse por delante en el marcador, llegaban más recuperaciones de balón y puntos fáciles en contraataque, tras pérdidas e incluso tras canastas que sorprendían a su rival.

Pero el Tenerife gracias al dominio abrumador del rebote, que mantuvo todo el partido, recuperó el control del ritmo de juego a través una vez más de Marcelinho, que no solo anotaba sino que conectaba con Abromaitis y shermadini que se mostró todo el partido muy superior a sus defensores. A pesar de ello el Unicaja tuvo el un último tiro en las mejores manos para ganar, Kalinoski, pero no pudo ser.