Máximos honores para Don Alfonso Queipo de Llano

A sus 84 años fue justo y merecido el homenaje que le tributó el deporte de la canasta de la ciudad y las autoridades locales y nacionales a esta figura clave para que prosperaran las semillas sembradas desde los años cincuenta. Lo que es hoy el baloncesto en Málaga es un deporte consolidado con un club de élite que, si bien de un tiempo a esta parte no vive sus mejores momentos deportivos, no cabe duda de que es un proyecto hecho y derecho, gracias en buena parte a labor de Alfonso.

Durante el descanso del choque ante el Nizhny Novgorod de este miércoles, Alfonso Queipo de Llano fue el centro de las miradas. En los videomarcadores se proyectaron imágenes históricas del baloncesto en Málaga, aún en blanco y negro. Asimismo, recibió una jábega de plata de manos del alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, y una biznaga de plata por parte del presidente de la Diputación, Francis Salado. Se sumó al homenaje, el Málaga, que le entregó una camiseta del equipo de manos del consejero Francisco Martín Aguilar. La relación es clara, pues uno de los clubes de Alfonso fue una sección del extinto CD Málaga.

Un exjugador, Rafa Pozo, y el que fuera su ayudante y su sustituto en el Caja de Ronda, José María Martín Urbano, le entregaron una camiseta actual, y en el momento cumbre del acto, el presidente de la entidad, Antonio Jesús López Nieto, le impuso el escudo de oro. La concejala de Cultura y Deportes del Ayuntamiento, Noelia Losada, y la delegada en Málaga de Educación y Deporte, Mercedes García-Paine; el presidente honorífico de la Liga ACB, Eduardo Portela, y el presidente actual, Antonio Martín, también le acompañaron a pie de pista.

«Muchas gracias por vuestra amabilidad. Hago extensiva la entrega de este escudo de oro a todos los que en mi vida deportiva han colaborado en elevar el nivel del Unicaja, antes Caja de Ronda», dijo emocionado. Citó a cubes como Aldemar, CD Málaga, Centro de Deportes el Palo, Caja de Ronda y Mayoral y recordó el papel clave del actual patrocinador: «El Unicaja nos ha vendo financiando y se han ido consiguiendo metas muy importantes en estos 40 años: la Copa Korac, la Liga ACB, la Copa del Rey, la Eurocup y la Final Four de la Euroliga». Y, para acabar, se despidió por verdiales. Los aplausos fueron atronadora en un Martín Carpena más poblado que en jornadas previas de la Champions.

No faltaron su esposa, Magdalena López-Cózar, tres de sus cinco hijos, Alfonso, Fernando y Alfredo (Paloma y Magdalena no residen en nuestra ciudad), Hermanos, nietos, nueras y sobrinos y, por supuesto, una amplia representación de los veteranos del baloncesto en Málaga, con Salvador Gallar, Diego Gómez, Bernardo Rodríguez (padre), Paco García, Álvarez Valverde, Ruiz Meliveo, Carlos Cabezas (padre), Ramos Llorca, Muñoz Ballesta, Luiso Díaz, Manolo Jato, Paco Alonso y Eugenio Oliver, por citar algunos nombres de una lista de varias decenas invitados por el club, que sigue afanado en forjar lazos con la ciudad, tras el éxito de la retirada de Cabezas como cajista y la incorporación de este y Berni Rodríguez como embajadores del equipo.