Probamos la pista de leds sobre la que se jugará la Final Four de la Champions League

La novedosa superficie permite proyectar todo tipo de grafismos e imágenes, creando así una sensación absolutamente distinta para los aficionados que se encuentran en el pabellón y para los espectadores que siguen el encuentro por televisión.

En la mañana de este miércoles se ultimaban las pruebas precisamente con los colores verde y morado, así que el pabellón lucía unos colores plenamente malagueños. Además, los técnicos, que han diseñado unos grafismos muy atractivos, también habían incluido el escudo del club cajista.

Más allá de la imagen, que es espectacular, se trata de que sea una superficie válida para la práctica del baloncesto. En este sentido, la sensación es la misma que sobre los parqués clásicos de madera. El balón bota igual y el suelo se hunde ligeramente al pisar, que es lo que ocurre con las superficies clásicas. Sobre el agarre, la pista tiene unos pequeños granos casi imperceptibles que quizá le confieren algo más de tracción de lo habitual; es decir, resbala menos, aunque esta sensación que tendrán los jugadores desaparecerá a medida que la vayan probando.

Esta superficie fue estrenada por la FIBA en el Mundial sub-19 jugado en España el pasado verano y entonces las valoraciones de las jugadoras fueron positivas. La NBA también la usó en el fin de semana de las estrellas y la Liga alemana la alquiló en el jornada inaugural en la pista del Bayern de Múnich.