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Jugar el 'play-off' de la Liga Endesa es el nuevo objetivo mínimo para el Unicaja. La demoledora racha negativa que acumula el equipo malagueño se llevó por delante las aspiraciones europeas del club y ahora también está en peligro la Liga Endesa. En novena posición, a un triunfo del octavo y con tres equipos por detrás con partidos por recuperar, el conjunto que dirige Fotis Katsikaris está hoy frente al Valencia (18.30 horas, Movistar Plus) ante una final para evitar que las alarmas salten también en el torneo liguero.
El problema es que la llegada del técnico no ha cambiado la dinámica del equipo. Se ven mejoras en algunas facetas del juego, pero la mentalidad está por los suelos y la confianza de algunos jugadores, también. Para complicarlo todo más todavía, esta tarde llega a Málaga el Valencia, otrora rival directo del club cajista como alternativa a los grandes y que a día de hoy está a años luz en todos los sentidos: deportivamente, a nivel de estructura, aspiraciones y presupuesto. El conjunto naranja es sexto en la clasificación, a cinco triunfos del Unicaja; un mundo. Una derrota hoy abocaría al cuadro cajista a luchar de aquí al final de la temporada por ser octavo o séptimo en el mejor de los casos. El Valencia llega con una racha de diez triunfos seguidos en la Liga Endesa, pero fundido después de una semana muy negativa en la Euroliga, en la que el miércoles cayó contra el Zalgiris y el viernes fue vapuleado por el Panathinaikos.
El cansancio del grupo que dirige Jaume Ponsarnau puede ser una de las bazas a favor de un Unicaja que tiene que agarrarse a cualquier recurso para salir de la crisis. En la primera vuelta de la Liga se vivió una situación muy parecida. El equipo malagueño comenzó mal la temporada y entonces llegó ese encuentro en la Fuente de San Luis en el que todos le daban por muerto. Con muchas bajas y con Casimiro ya cuestionado, Alberto Díaz lideró al Unicaja para ganar al Valencia en un partido soberbio (9 puntos, 7 rebotes y 7 asistencias). Aquello sacó al equipo de la primera crisis y abrió la etapa de mejor juego y resultados de esta temporada.
Ahora ya no está Casimiro, pero los problemas persisten. Hoy el Unicaja tendrá delante a un rival muy sólido, pese a los resultados que ha tenido en la Euroliga. Katsikaris recupera a Carlos Suárez, que se vestirá, pero del que no se puede esperar que sea el salvador. Lleva un mes y medio parado y las lesiones le han impedido tener continuidad hasta el momento. Su vuelta implicará un descarte: Ferrari o Gerun, con el que no se cuenta, pues se está buscando un pívot desde hace semanas.
Cualquier opción de victoria del Unicaja pasa por mejorar en defensa y tener una mejor mentalidad competitiva. Por lo visto en el último mes, el equipo es incapaz de revertir un marcador adverso especialmente en los finales de partido.
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