La disputa de una final europea siempre es un imán para todos los personajes que interactúan en el mundo del baloncesto: jugadores, periodistas, ojeadores, directivos ... de clubes y representantes. Sin embargo, la Final Four de la Basketball Champions League está siendo diferente en este sentido.
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Normalmente, como ocurre en la Copa del Rey o en la Final Four de la Euroliga, el hotel de concentración de los equipos se convierte en un centro de negocios del baloncesto. Agentes de todo tipo aprovechan la confluencia de muchos jugadores para adelantar gestiones cara al verano que está a la vuelta de la esquina. En el caso de Belgrado, sólo un puñado de representantes se han desplazado a la capital serbia. Moisés Cohen (Beo Basket) y Juan Lasso (Romaior Sports) fueron los primeros en llegar en la jornada del jueves, mientras que para hoy y el fin de semana se espera a otros como Andras Lorant (Loranthazi Sport Agency) y David Carro (Octagon). El serbio Misko Raznatovic, presidente de Beobasket, ha estado toda la semana en Atenas presenciando la serie de cuartos entre el Panathinaikos y el Maccabi, y regresa a su ciudad este viernes justo para el primer partido de las semifinales.
Lo que sí ha habido son muchas visitas de jugadores y amigos de los jugadores. Uno de los primeros en aparecer por el Crown Plaza, que así se llama el hotel, fue Zoran Savic, exjugador, exagente y en su día responsable de la sección de baloncesto del Barcelona. Ahora es el director general del Partizán. Savic mantuvo una reunión con el director deportivo del Unicaja, Juanma Rodríguez, y departió un buen rato con Nihad Djedovic, pues fue él el que lo fichó para el Barcelona cuando sólo tenía 16 años.
Con siete equipos profesionales en Belgrado, hay muchos exjugadores de la Liga ACB y algunos visitaron a sus excompañeros. Fue curiosa la llegada de Mike Tobey (Gran Canaria y Valencia) ahora en el Estrella Roja. El estadounidense se pasó a saludar a Will Thomas, Joan Sastre y Aaron Doornekamp, con los que coincidió en el Valencia. Este viernes fue curiosa la cariñosa charla entre el entrenador del Peristeri, Vassilis Spanoulis, y el director general del Armani Milán, Christos Stavropoulos, que se personó en el hotel acompañado de algunos amigos.
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