Jaime Fernández y Carlos Suárez, en el duelo del martes en la Champions. MARIANO POZO

La permanencia como primer objetivo

Sólo sumar las victorias necesarias cuanto antes, pese al duro calendario inmediato, permitiría al Unicaja soñar a medio plazo con unos 'play-off' cada vez más caros

Sábado, 29 de enero 2022, 00:10

El Unicaja se centra ya en la lucha por la permanencia como primer reto cara a los meses que quedan de temporada. Con sólo tres triunfos de colchón ahora sobre la zona de descenso no hay mucho margen más para los tropiezos antes de poder verse en apuros reales.

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De por sí, es una situación inédita para el equipo en las tres últimas décadas. Pero la realidad es que casi todo lo que ha sucedido en el Unicaja desde la entrada de 2022 ha sido para complicar aún más un panorama incierto: derrota ante el Valencia para despedirse de la Copa del Rey de Granada, percance físico de Abromaitis, primer brote por coronavirus en el grupo, lesión grave de Eric, derrota inesperada en el arranque de la nueva fase en la Champions que dificulta el pase, y fichaje de Devin Williams rechazado por no pasar el reconocimiento médico.

De forma paralela, coincidiendo con una nueva oleada de la pandemia, el respaldo de seguidores en el Carpena ha seguido menguando, muy por debajo del promedio en torno a 4.000 seguidores del curso. Así las cosas el objetivo es sumar victorias cuanto antes para amarrar la permanencia y llegar a ilusionarse con los 'play-off'.

Miribilla, ¿un punto de inflexión?

La oportunidad de un punto de inflexión está en la cita de mañana en Miribilla ante el Surne Bilbao, pero el Unicaja se medirá a uno de los equipos más en forma de la Liga Endesa, tras encadenar cinco triunfos: 83-75 al Breogán, 95-80 al Gran Canaria, 74-71 al Andorra, 91-96 en la pista del Obradoiro y 71-88 en Sevilla ante el Betis. No está claro que el actual Unicaja, un equipo de rachas, dependiente del tiro exterior y de sus individualidades, pero con muy poco juego colectivo en ataque y débil en defensa, pueda frenar a un rival crecido con jugadores en muy buen momento, como el excajista Freire, Hakanson, Bigote, Peno, Inglis y Delgado.

El Unicaja habrá completado media campaña cuando regrese de Bilbao, y lo podría hacer con un balance de 7-10. Otro dato a tener en cuenta es que no ha ganado a ninguno de los numerosos rivales de la Liga Endesa que compiten en torneos europeos. La única excepción se da con el amplio triunfo ante el Hereda San Pablo Burgos (89-78), sumido en zona de descenso.

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El calendario liguero cercano obliga a ser cauto, con la salida a Zaragoza (sábado 5 de febrero, a las 18.00), en un duelo que propició una paliza histórica (112-72) hace unos días en el Carpena, aunque el cuadro maño llegaba tras superar un brote y eso mermó su rendimiento. Posteriormente, toca recibir al Real Madrid (domingo 13, a las 18.30), líder en la Euroliga y en la Liga Endesa, y a la 'revelación' del campeonato, el UCAM Murcia (sábado 5 de marzo, a las 20.45), ya a la vuelta de un nuevo parón por una ventana FIBA.

A tenor de lo sucedido en las últimas campañas, la permanencia suele requerir entre ocho y once triunfos. Mientras, si el Unicaja aspirara a jugar los 'play-off' por el título tendría que ganar entre diez y doce partidos de los dieciocho pendientes. De lo que suceda en las próximas semanas dependerán las miras del equipo: hacia arriba o hacia abajo.

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