El Unicaja tiene que mostrar sus cartas

Ahí tendrá que mostrar sus cartas el Unicaja después de dos meses de idas y venidas con un grupo de los profesionales que acaban su vinculación y que todavía no tienen claro cuál es la postura del club cajista. El grupo es reducido y está compuesto por Francis Alonso, Rubén Guerrero, Tim Abromaitis y Jaime Fernández.

Cada uno representa una situación distinta, tal y como se ha ido informando en las últimas semanas. Quizá habría que empezar por el último, con Fernández, pues es la situación más particular. La imposibilidad de fichar a Bruno Fitipaldo ha hecho que pase de estar descartado a recibir una oferta de renovación del Unicaja. La propuesta ha llegado tan tarde y dista tanto de las pretensiones del jugador que no la va a aceptar. De este modo, el Unicaja tendrá que decidir si busca otro jugador para completar la dirección del equipo o asume el salario del madrileño.

Hay que explicar que incluir a un jugador en el tanteo implica una oferta por el cien por cien del salario de su última temporada de contrato, de ahí que esto sea un arma de doble filo para los clubes. Antes era por el setenta por ciento, pero se eliminó este porcentaje porque era un método que los clubes usaban para rebajar los salarios.

Casos distintos

Los casos de Rubén Guerrero y Francis Alonso son distintos. Ambos son canteranos y el Unicaja sabe que desprenderse de dos malagueños no es un buen mensaje de identificación con los aficionados. Por este motivo, a ambos se les ha propuesto una fórmula para que queden vinculados de algún modo con el club, con una opción de 'repesca'; un contrato privado, pero está por ver si lo aceptan. Quizá Guerrero sí, pero no parece ser el caso de Francis Alonso, que tiene un preacuerdo con el Bilbao Basket.

Y luego está el caso de Tim Abromatis. Al contrario que con Fernández, con él se abrió una negociación para renovarlo nada más acabar la temporada. Parece que hay buena sintonía, aunque la oferta del Unicaja estaba lejos de lo que el estadounidense percibía esta campaña. En cualquier caso, hay un trayecto recorrido y quizá no sea necesaria la fórmula del tanteo para retenerlo, en parte porque sería demasiado caro para el club.

Además de lo que decida con sus jugadores, el Unicaja también estará pendiente de este nuevo 'mercado restringido', pues podrá realizar ofertas por los jugadores retenidos hasta el próximo día 14.

Quizá el único objetivo claro, o al menos conocido, es el de James Webb, si bien parece que el jugador podría haber recibido el interés de otro equipo. Algunas fuentes indicaron que el Valencia estaría interesado en el estadounidense del Murcia, que ya hizo pública su intención de meterlo en el tanteo. El Unicaja no puede competir con el Valencia, en parte porque las ofertas del club cajista son hasta ahora por una campaña con opción a una segunda.