Nzosa: «La gente se burlaba de mí por ser alto»

Las actuaciones de Nzosa llamaron la atención de Pau Gasol, quien incluso telefoneó al jugador del Unicaja para darle algunos consejos, según se indica en la entrevista. «Pau Gasol lo llamó un día y terminaron hablando un buen rato por teléfono. El dos veces campeón de la NBA ofreció algunos consejos y respondió preguntas de Yannick, quien estaba ansioso por aprender más sobre él y experiencia«.

Gasol no es el único jugador de la NBA que sigue de cerca la evolución de Nzosa, también su compatriota Serge Ibaka, al que el jugador del Unicaja considera una referencia, tanto por su trayectoria como lo que está haciendo por el baloncesto en su país. «Ibaka es la referencia para mí. Es congoleño y en el Congo ayuda a la gente. Es un ejemplo a seguir. Veo un poco de mí en él, en la forma como juega en defensa y cómo finaliza las acciones de bloque y continuación», dice Nzosa que se define así. «Soy un jugador rápido y da el cien por cien. Soy bueno en jugadas de 'pick and roll'. Puedo defender el 1, el 2 y el 3. Físicamente, no soy tan bueno; realmente necesito fortalecer mi cuerpo, hacerme más fuerte. Juego con mucha energía aunque lo dejo todo en la cancha«, cuenta.

Nzosa explica que está un tanto sorprendido por cómo le están yendo las cosas en Málaga. El pívot se ha convertido en una de las sensaciones de la Liga a sus 17 años, pues ha batido varios récords de precocidad. Recientemente la publicación 'Draft Express' le asignó la cuarta posición en el Draft de 2022, lo que lo convierte en uno de los mejores jugadores jóvenes del mundo a su edad. El jugador del Unicaja se refiere a esto así: «Para ser honesto, nunca pensé en romper esos récords cuando comencé a jugar esta temporada. Ni siquiera pensé que fuera lo suficientemente bueno para jugar. Cuando veo los nombres en esa lista, me dan ganas de trabajar más duro porque es un honor ser mencionado al lado de esos grandes jugadores que son mucho mejores que yo », dice Nzosa. «Realmente no me gusta cuando la gente intenta compararme con esos tipos. Lo único que sé es que estoy trabajando de la manera correcta y necesito seguir trabajando para llegar a donde están, ese sueño de jugar en la NBA «.

 

Nzosa tiene un futuro prometedor, pero sus comienzos no fueron fáciles. Su altura le generó problemas en su barrio, donde comenzó jugando al fútbol. «No es fácil ser alto en mi vecindario. La gente se burlaba de mí. Pero jugar baloncesto me hizo sentir bien conmigo mismo, así que ya no me importaba ser alto «. El cajista fue aconsejado para que jugase al baloncesto y ahí fue clave la figura de Joe Lolonga, su mentor, hombre de confianza y la persona que está dirigiendo su carrera.

«En mi barrio, todo el mundo me decía lo fácil que sería para mí jugar baloncesto. Eres tan alto, solo tendrás que pasar por debajo de la canasta y anotar... Y ese primer mes, fue una lucha. Estaba estresado porque no sabía cómo jugar. Estuve en el banquillo todo el tiempo, sólo mirando a mis compañeros de equipo. Traté de hacer cosas pero técnicamente estaba demasiado limitado. Estaba frustrado, realmente frustrado. La gente me había dicho que el baloncesto sería fácil para mí y yo me dije a mí mismo, tengo que entrenar duro», dice Nzosa.

Es trabajo dio sus frutos y Nzosa empezó a destacar. Llegó el salto Italia y, luego, a España. Pero no fue fácil dejar su país y su familia, según desvela Lolonga, que recientemente estuvo en Málaga para renegociar su contrato. Para Nzosa lo más complicado fue dejar atrás a su madre. «Fue muy difícil para mí dejar a mi familia. Mi mamá me animó a ir a Italia para seguir mi camino. Ella sabía que sería difícil al principio, solo en un nuevo continente, pero me dijo: '¡Tienes que ir allí y trabajar duro!' Fue difícil cuando llegué por primera vez a Italia, acostumbrarme al clima frío fue complicado pero finalmente logré lidiar con eso », dice Nzosa, que ahora lleva un mes lesionado.