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Enrique Miranda
Miércoles, 19 de octubre 2016, 05:19
El estreno del Unicaja en la Eurocup, la segunda competición europea, se está haciendo de rogar más de lo esperado. Primero fue el convulso verano, tras las amenazas por parte de la FIBA y de la Federación Española de sancionar a los clubes que militasen ... en la Eurocup; después vino la reducción de equipos, y por último, la jornada de descanso del club malagueño en la primera semana de competición. Ayer, cuando el club malagueño se disponía a viajar a Montenegro para jugar hoy contra el KK Buducnost (18.45 horas, por Andalucía Televisión), apareció el enésimo problema. Una fuerte tormenta de viento y precipitaciones impedía que el vuelo chárter del Unicaja volase hacia Podgorica, por lo que el equipo tuvo que cambiar todo el plan de viaje. Primero se buscaron alternativas en ciudades cercanas, pero, en vista de las malas condiciones meteorológicas, los jugadores tuvieron que recoger su equipaje y regresaron al Palacio de los Deportes.
Si el tiempo lo permite, el avión del Unicaja, con la plantilla y el cuerpo técnico; el presidente del club, Eduardo García, y algunos aficionados (seis tenían previsto viajar en un principio), saldrá hoy a primera hora de la mañana para llegar a Montenegro sobre las 11. No habrá tiempo apenas para entrenar en el Centro Deportivo Moraca, el pabellón del Buducnost con capacidad para 4.570 espectadores. El equipo tiene previsto marcharse al hotel, comer pronto y descansar, ya que el partido es a las 18.45 horas. Este cambio de planes puede afectar al rendimiento del cuadro malagueño, que jugará en Montenegro con la baja de Nedovic por lesión.
Los peligros del rival
El Unicaja busca su primera victoria en la Eurocup en la cancha de uno de los rivales menos potentes en teoría, pero que es líder de la Liga Adriática y que se hace fuerte en su campo. El conjunto montenegrino cayó en la primera jornada ante el Murcia (86-77). El exjugador del Unicaja Marcus Williams y el pívot Shawn James son algunos de los peligros del equipo de Podgorica. Ni el
talentoso base norteamericano ni el exjugador del Maccabi están ya en el mejor momento de su carrera, pero son refuerzos de nivel para el Buducnost. Ayer Plaza destacó además la polivalencia de sus pívots, que pueden jugar al poste bajo y lanzar de tres. «El Buducnost es un equipo compensado, serio y duro, al que si no respetamos nos ganará», afirmó el entrenador.
El pívot Boris Savovic es el más valorado del equipo (22 puntos y 11 rebotes ante el Murcia), seguido de los escoltas Vranjes y Sehovic, dos hombres a tener en cuenta. En el banquillo, el exjugador con pasado en la ACB Vlado Scepanovic.
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