Un micrófono a Jaime Fernández ratifica el dudoso rasero arbitral en la derrota del domingo

«Vamos bien. Un par de triplitos y se lía», le dijo el 'combo' madrileño a Ángel Sánchez Cañete en el descanso (23-35), antes de que comenzaran las acciones para la polémica. «A mí me pistas unas faltitas y esto...», le dice a uno de los árbitros. «Puede ser que le toque, que le agarre, pero no estoy sacando ninguna ventaja. Luego Calathes y Laprovittola me agarran cada vez también», fue otro de sus comentarios posteriores.

Al final Sergio Manuel, uno de los tres árbitros, le pitó dos técnicas muy rigurosas en un corto periodo que le descalificaron a poco del final, cuando más igualdad presentaba el choque. La primera acción en cuestión fue en una penetración de Hayes. Jaime Fernández se queda quieto esperando el choque. Lo que no parece que pueda haber es simulación, lo que en argot del baloncesto se conoce como 'flopping'. La segunda técnica fue por protestar, tras una falta de Nzosa a Davies.

El resultado fue que en un minuto y medio final en el que el Unicaja sometió a una presión máxima al invicto Barça, este pudo salir airoso y ganar el partido. La queja de Katsikaris tras el partido, en la sala de prensa, fue en todo caso más tibia que tras lo sucedido en la Copa del Rey.