Melvin e Yvonne Ejim, unos Juegos en familia

La presencia de dos Ejim en los Juegos de París es la culminación de la cultura de baloncesto que hay en la familia. Son cinco hermanos y todos son jugadores profesionales, aunque Kenny falleció en 2022, algo que afectó mucho a un núcleo familiar muy unido.

Melvin Ejim es el que ha tenido una trayectoria profesional más sólida. Además de ser un fijo en la selección de Canadá, ha jugado en clubes de la Euroliga y la Eurocup, además de con el Unicaja, el equipo en el que más tiempo ha militado.

Lo llamativo es que todos juegan en la posición de ala-pívot, lo que da una idea de los fuertes genes atléticos de sus padres. Deon, de 1,99 ha sido el último en alcanzar el profesionalismo. La pasada campaña jugó con el Calgary de la segunda canadiense.

Por su parte, Ryan, de 2,01 metros y 30 años, tiene una historia curiosa, pues ha desarrollado casi toda su carrera en España al jugar en clubes de la LEB Plata como el Gijón, Albacete o Algeciras, con este último en la EBA. Su último equipo fue la pasada campaña el Olimpia de Montevideo.

También jugó en España, Kenny, (Melilla y Zornotza), cuyo cuerpo apareció sin vida el 14 de febrero en la habitación del hotel en el que residía en su estancia en Bahrein, donde estaba jugando para el Al-Najma. Su muerte fue un drama para Melvin Ejim, pues estaban muy unidos.

Y ahora llega Yvonne, la más pequeña de la saga de los Ejim. Como sus hermanos, también juega en el puesto de ala-pívot con 1,82 metros. Actualmente milita para la Universidad de Gonzaga y seguramente dará el salto al profesionalismo en los próximos meses, porque es una de las estrellas de su equipo. La mejor de los cinco hermanos ha promediado esta temporada 20 puntos y 8 rebotes. Yvonne se estrenó con el equipo canadiense absoluto el año pasado y ha sido pieza fundamental en el Torneo Preolímpico para lograr la clasificación para los Juegos. Canadá quedó encuadrada en un grupo muy complicado junto a Francia, Australia y Nigeria.