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El Unicaja se recompone cara a la exigente recta final de temporada que tiene por delante. Después de dos encuentros bajo mínimos por culpa de las lesiones, el equipo comienza a recuperar efectivos. Para el partido de este sábado ante el Herbalife Gran Canaria está previsto que tanto Alberto Díaz como Darío Brizuela estén a disposición de Fotis Katsikaris. El primero sufrió un esguince en el tobillo izquierdo en el choque ante el Estudiantes, mientras que el segundo tenía molestias en la rodilla izquierda y causó baja después de se partido.
También podría volver al equipo Gal Mekel. El israelí ha entrenado con normalidad esta semana y el martes confirmaba a SUR que su idea es volver el sábado frente a su exequipo. El base sufrió un trombo pulmonar como consecuencia del coronavirus a finales de diciembre y semanas después se informó de que estaría de baja un mínimo de tres meses. Posteriormente el asunto perdió algo de gravedad después de los informes de un especialista de su país. Mekel se ha ejercitado a buen ritmo en las últimas semanas y es muy optimista sobre su estado. Hay que recordar que antes de aquello sufrió una operación en la mano izquierda tras romperse el segundo metacarpiano en el encuentro jugado ante el Brescia en Italia.
La situación de Carlos Suárez es distinta. El madrileño esperaba estar operativo para el sábado, pero en su caso su regreso se va a retrasar todavía unos días más. No se quiere arriesgar después de que haya sufrido tres lesiones musculares en la zona de los gemelos desde que comenzó la temporada. Su regreso podría producirse la próxima semana en el choque ante el Obradoiro en Santiago (sábado 20, 18.00 horas).
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