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No es un debate nuevo, pero pocas veces ha surgido la posibilidad de que se escenifique en toda su plenitud. El regreso de Darío Brizuela el próximo sábado va a provocar que el Unicaja tenga a toda su plantilla disponible por primera vez en casi ... temporada y media. No debería ser una noticia que todos los jugadores estén sanos, pero la historia reciente del club cajista está jalonada de contratiempos físicos que impidieron ver al equipo completo.
El club puso fin a su vinculación con Edgar Vicedo esta semana ante el regreso de Darío Brizuela, una vez superada su lesión en el tobillo derecho. La incorporación del vasco completa el puzle cajista, pero escenifica a la vez un rompecabezas interesante, como es la gestión de los minutos entre los jugadores que ocupan los puestos de bases y escoltas, que son los que tienen el protagonismo en el equipo: Jaime Fernández, Alberto Díaz, Norris Cole, Francis Alonso y el propio Brizuela. Con todos ellos rindiendo a buen nivel y con el vasco recuperando su rol principal, Katsikaris tendrá que hilar fino.
Jaime Fernández es a día de hoy más que intocable en este equipo. Se trata del mejor jugador de la Liga en estos momentos y líder del equipo en muchos apartados estadísticos. Con su físico al cien por cien, el madrileño es, sin duda, el jugador franquicia de esta plantilla. Su rendimiento ha sorprendido hasta al propio técnico griego, tal y como reconoció días atrás. El juego del Unicaja gira alrededor suyo en muchos momentos, tanto por su capacidad para anotar como para generar puntos y ventajas para sus compañeros.
Curiosamente, Norris Cole, que pagó en los primeros partidos su falta de adaptación, viene de hacer un encuentro de gran nivel ante el Breogán, en el que asumió el liderazgo anotador del equipo. Su juego es casi un calco al de Brizuela, por lo que parece una pareja difícil de combinar, aunque en el encuentro ante el Murcia, Katsikaris los alineó juntos en el quinteto inicial.
El técnico parece haber encontrado los contrapesos a tanto potencial ofensivo con Alonso y Díaz, pues ha recurrido a ellos para gestionar con más rigor los finales de partido. El malagueño ha evolucionado en su faceta defensiva y es un jugador que no necesita tanto balón como sus compañeros. Por otro lado, el paso adelante dado por Alberto Díaz, que seguramente está acompañado de unas mejores sensaciones físicas, permite al Unicaja recuperar a su mejor defensor. Su papel fue clave en la recta final del choque contra el Murcia y también en el duelo ante el Breogán, ambos sin Brizuela en la rotación... El técnico ha explorado todas las combinaciones posibles, incluso jugando con tres pequeños (Fernández, Cole y Díaz), cuando no le fue posible utilizar al jugador vasco por lesión.
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