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Domingo, 7 de noviembre 2021, 22:28
Pese a la derrota en Vitoria, Fotis Katsikaris se mostró bastante satisfecho con el trabajo de los suyos, asegurando que había visto bastantes aspectos mejorados con respecto a partidos anteriores. Para el entrenador griego, la clave de la derrota estuvo en los rebotes ofensivos del ... Baskonia, un aspecto que no supieron controlar y en el que fueron «castigados». «Tenemos que controlar el rebote, una de las claves de un partido tan justo. Han metido 12 puntos tras rebote ofensivo, y ahí teníamos que estar más preparados, con más contacto, y los jugadores en la cancha tenían que ir a por el rebote. El rebote es un factor muy importante en el baloncesto», apuntó.
Katsikaris comentó que, pese al buen comienzo de partido, con «buena defensa, buena actividad, y buenas decisiones en ataque», el hecho de que el Baskonia comenzara a jugar con un quinteto pequeño les quitó «fluidez en ataque». «Hemos salido bien, con buena defensa, buena actividad, y buenas decisiones en ataque. Teníamos controlado el primer cuarto, aunque hemos cometido unos errores, no tácticos, sino de actividad. Marinkovic ha entrado caliente en el partido… Luego, cuando Dusko ha decidido poner un quinteto bajo con exteriores, con Sedekerskis de cinco, no es fácil jugar contra esto. Ahí hemos perdido un poco de fluidez en ataque, hemos pensado demasiado y hemos cometido errores», indicó.
El entrenador del Unicaja también explicó cómo se habían dado dos de las últimas jugadas del partido desde su punto de vista. «El último rebote, no sé. El árbitro principal me ha dicho que han entrado los dos jugadores a la vez, aunque yo había visto que Giedraitis había entrado primero y había sacado una ventaja ahí, pero bueno, no puedes fallar un rebote así en ese momento», indicó sobre la primera. En cuanto al saque de Baskonia desde el fondo, que se tuvo que repetir desde la zona de ataque del conjunto vitoriano a falta de nueve segundos, Katsikaris dijo que el árbitro le había explicado que «la norma es sacar de donde ha parado el árbitro con el pitido. Se juega desde donde ha botado el balón». «Yo creía que teníamos que jugar desde el fondo, pero el árbitro principal me ha explicado que la norma es así, por el mal funcionamiento del reloj», dijo.
Preguntado también por la mala racha de cuatro derrotas consecutivas en la ACB, el técnico griego lanzó un mensaje de tranquilidad, asegurando que el calendario de esos cuatro partidos era «difícil», que seguirán compitiendo, y que ha habido «cosas muy buenas en los cuatro partidos». «Mi equipo está jugando bien. Menos el partido de Andorra, está compitiendo. Tenemos un calendario difícil en esta fase con tres partidos fuera y uno en casa contra el Barcelona. No es fácil ganar fuera. Vamos a seguir, mejorar lo que hay que mejorar, siendo más inteligentes en algunos momentos. El equipo está bien, estamos trabajando bien, tiene buena actitud, tiene buena mentalidad y vamos a competir, por supuesto que sí. Repito, era un calendario durillo, porque no es fácil ganar en las canchas donde hemos jugado. He visto cosas muy buenas que hemos hecho en los cuatro partidos y he visto cosas que hemos mejorado mucho hoy -por ayer-, y ya sabemos el camino que tenemos que seguir e insistir».
El entrenador del Baskonia se mostró conforme con la imagen de su equipo tras vencer al Unicaja en un partido muy ajustado. Aseguró que era una victoria «necesaria» tras dos semanas «terribles» de resultados y de juego. Destacó el segundo tiempo del conjunto vitoriano, en el que le gustó «la manera de luchar, de estar en pista y de mostrar carácter».
Sobre su decisión de contar con una rotación muy pequeña, el técnico montenegrino fue muy claro y contundente: «Si hay que morir, morirás de pie y con la gente en la que crees. En este partido he creído en los jugadores que estaban en pista. El próximo partido puede ser que sean otros, pero hoy, esta noche, estos jugadores eran capaces de ganar al Unicaja».
Ivanovic apuntó que los jugadores con los que había contado jugaron «un gran partido» y que las claves del triunfo fueron la actitud y la velocidad de balón. «No nos hemos rendido en ningún momento. Este equipo tiene que jugar agresivo, rápido y buscando soluciones. Esta noche el balón circulaba, teníamos tiros abiertos, agresividad defensiva… con fallos, pero el equipo creía que podía ganar el partido». Así el Baskonia corta una racha aciaga, algo que el entrenador espera que sirva para dar «un poco de moral a todo el mundo» de cara a los próximos encuentros.
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