Cuando el Unicaja prescindió de los servicios de Juanma Rodríguez en el 15 de junio de 2010 pocos se imaginaban que el malagueño acabaría volviendo al club once años después para desempeñar las mismas funciones que entonces. Este martes el consejo de administración cajista confirmó lo que era un secreto a voces desde hace meses, el regreso de Rodríguez como recambio de Manolo Rubia en la dirección deportiva.
Publicidad
Rubia trasladó a los responsables de la entidad su deseo de jubilarse cuanto antes, pero la temporada pasada tuvo unas connotaciones especiales por la pandemia y esa retirada se fue demorando, a pesar de su propio deseo. Era evidente que habría que buscar un relevo más tarde o más temprano. Ya en diciembre el nombre de Juanma Rodríguez circulaba como más que probable alternativa. Fue un mes clave porque entonces se empezaron a fraguar todos los cambios que ahora se están confirmando. La liebre la hizo saltar Joan Plaza, cuando en la visita del Betis a Málaga antes de final de año comentaba de forma abierta que Rodríguez sería el próximo director deportivo. En ese momento, la Fundación Bancaria, propietaria del club, ya había votado y aprobado su decisión de retirar su aportación al presupuesto del club... Iba bien encaminado el catalán, aunque luego los responsables del Unicaja tantearon otras opciones.
En Málaga, el expresidente Eduardo García planteó la opción de Germán Gabriel, que ya había comunicado que no quería seguir como entrenador. Los meses pasaron, García renunció a su puesto y aquello precipitó los acontecimientos al tiempo que aceleró la llegada de Antonio Jesús López Nieto a la presidencia. El exasesor del Partido Popular tenía claro que su hombre era Juanma Rodríguez, persona de su máxima confianza tras coincidir ambos en la Diputación Provincial bajo los mandatos de Elías Bendodo. El malagueño había hecho un buen trabajo en el Coosur Betis y se valoraba su papel clave en la etapa de mayor éxito del club con los títulos de Copa, Liga y la presencia en la Final Four.
En los tres meses que ha vivido de indefinición el Unicaja se tantearon otras opciones, pero había que abordar distintas variables y la sintonía que debería tener con la nueva directiva, que de forma ya evidente estaría encabezada por Nieto. Se planteó la continuidad de Manolo Rubia, que sin embargo mantuvo su idea de jubilarse, se pensó en Alejandro Gómez, director general del UCAM Murcia, de un perfil más de director general por lo que no encajaba, y se contactó con Berni Rodríguez, que ahora está centrado en otros asuntos profesionales.
La designación de Nieto como consejero despejó la incógnita y confirmó el regreso de Juanma Rodríguez como director deportivo. Ambos han estado al tanto de todos los movimientos del Unicaja, a pesar de que no habían sido nombrados de forma oficial. Quizá fue esto lo que demoró algunos movimientos y que se descartaran ciertos jugadores.
Publicidad
Ahora ya Juanma Rodríguez tiene plenos poderes, quizá más que en toda su etapa anterior en el Unicaja y, por supuesto, más que sus antecesores en el carto. Cuenta con el respaldo total del nuevo presidente, que confía ciegamente en su conocimiento del mercado y en su gestión de las relaciones personales para llevar el proyecto a buen puerto. Estas dos cualidades fueron claves en los éxitos pasados del Unicaja. Rodríguez tuvo que lidiar con técnicos muy exigentes, especialmente en la época de Bozidar Maljkovic y Sergio Scariolo. Ellos acaparaban el protagonismo, pero la sintonía con el malagueño era el contrapeso perfecto para que aquel ciclo fuese tan positivo. Es cierto que fue un periodo de gran abundancia presupuestaria, algo que ahora no no hay. La etapa de Aíto, con una mala segunda campaña y la duplicidad de funciones con Berdi Pérez, entonces director general, le costó el puesto aquel 15 de junio de 2010.
En el capítulo económico, Juanma Rodríguez llega aclimatado a esa nueva realidad del mercado. El presupuesto del Unicaja es tres veces mayor que el del Betis, pero está condicionado por la gran cantidad de contratos ya firmados. El margen de actuación para lo que le queda por hacer es poco, aunque habrá que hilar fino para apuntillar bien una plantilla que tiene peligrosas coincidencias con la de la temporada pasada en términos de físico. Quizá el gran cambio llegará la próxima campaña con el fin de algunos contratos, salvo que ahora se quieran adelantar algunas decisiones... Será entonces cuando Juanma Rodríguez tendrá más margen de maniobra. Está por ver también qué decisiones se toman respecto a la cantera, que en opinión de muchos necesita de una vuelta de tuerca.
Suscríbete durante los 3 primeros meses por 1 €
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.