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El Unicaja se recompone en todos los sentidos. Tras enderezar su situación deportiva con cuatro triunfos seguidos, también empieza ya a vaciar la enfermería. Primero volvió Carlos Suárez y el siguiente será Jaime Fernández. El base madrileño busca ya fecha para unirse al ... equipo después de haber realizado los primeros entrenamientos junto al resto de sus compañeros. La próxima semana será clave con partidos cada 48 horas ante el Ratiopharm Ulm, Zaragoza y Obradoiro, y cualquier ayuda de refresco será importante para los jugadores de perímetro, espci
Fernández se operó a comienzos de mayo de los dos talones después de una temporada marcada por las continuas molestias en ambas piernas. Su último servicio fue en la Copa del Rey, en el que se desfondó y ya la lesión le impedía hasta andar con normalidad. El confinamiento supuso una tregua y siguió un plan de recuperación, que no dio el resultado esperado y que le llevó, como se esperaba, a pasar por el quirófano en la capital de España.
Su evolución ha sido muy positiva durante estos meses. Su morfología le ha ayudado, no a acortar los plazos, pero sí a no sufrir retrasos ni complicaciones. Es un jugador liviano y esto es clave para la evolución de una intervención tan seria como la que sufrió. Hace unas semanas recibió la visita en Málaga del traumatólogo que lo operó, que confirmó las sensaciones positivas que tenía el jugador.
Las cosas van bien, pero conviene aclarar que Jaime Fernández todavía sufre molestias en los dos talones. Sin embargo es una situación distinta a la que padecía. Ahora está incómodo cuando está volviendo a forzar la máquina en los entrenamientos, pero según apuntaba a SUR hace unos días, al menos puede caminar después de cada sesión. Antes de la operación, casi no podía andar después de entrenar y al día siguiente amanecía con la zona muy dolorida. Todo esto ha desaparecido. Es previsible que la mejoría continúe y que las molestias que ahora siente en los primeros entrenamientos con el grupo desaparezcan. Otra cosa es cómo está de forma. Después de tanto tiempo sin correr y forzar el cuerpo, su estado de físico es deficiente y le cuesta mantener el ritmo, pero esto también se mejorará poco a poco y nada mejor que volver a jugar para que la recuperación se completa.
El Unicaja está pendiente de Gal Mekel para ver si el jugador israelí puede volver al equipo este domingo en el choque ante el Iberostar Tenerife (12.30 horas, Movistar). El base sufrió una rotura de fibras hace dos semanas y esto ha obligado a Alberto Díaz a hacer un gran esfuerzo y a asumir una cuota de minutos superior a la habitual. Luis Casimiro también ha empleado a Brizuela como director de juego. Con el vasco al timón del equipo, el Unicaja ha jugado un estilo más directo. Si Mekel está recuperado, será de gran ayuda porque el Tenerife tiene grandes bases.
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