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Una Liga Endesa más competitiva y la necesidad de mostrarse regular y fiable ante equipos de la zona media y baja. Sobre esta idea giró la comparecencia del entrenador del Unicaja, Ibon Navarro, este viernes, en la que reconoció sin ambages que «la Liga es ... mejor que el año pasado, una vez más». «Los recién ascendidos están dando mucha guerra. El Andorra va 4-3 y ya sabemos lo que es jugar en Palencia. Luego están Bilbao, Girona, Obradoiro, y hay equipos con resultados peores que subirán como el Breogán. Si te mantienes como el año pasado no será suficiente para estar donde estarías. Tenemos que ser mejores, con humildad», añadió en su argumentación, y lanzó otro aviso: «A ver cuántas victorias suman los cuatro o cinco peores de la Liga, seguro que más que hace un año».
En esa misma línea, dejó entrever que, una campaña después, cuesta más ganar partidos como el de este sábado (18.00 horas) en el Martín Carpena, ante el Monbus Obradoiro. «Si no mejora, empeoras, porque los demás equipos van a mejorar. Ya podemos ir viendo cómo va la competición. El año pasado al equipo no necesitábamos hablarle de la humildad. Éramos un equipo nuevo, no respetado. Este año cambia. No sé si la diferencia media fuera ante otros equipos fue de 15 puntos, y ahora cuesta y ya hemos tenido algún susto (en referencia a lo sufrido en Zaragoza, sobre todo)», comentó el preparador vitoriano.
Además, sostuvo que para la progresión de su equipo se necesita «bajar los porcentajes de tiro de los rivales y el número de asistencias, y en las dos últimas jornadas lo hemos hecho».«Hay que dar tiempo a que Sima y Kravish se asienten más, que tengan más volumen de partidos», añadió en esta línea cara a este objetivo.
Sobre el rival, con un 3-4 en su balance de triunfos y derrotas: «Tiene tres victorias y lo normal es que pudiera tener una más. A pesar de las bajas de Rigoberto Mendoza y de Washington y de la ausencia de Howard, encuentran soluciones desde el trabajo y con herramientas tácticas. Saben competir. Se recuperaron de parciales importantes fuera y salvo ante el Valencia han ganado al menos dos cuartos en cada partido. Tenemos que estar preparados para ser la versión más fiel a nosotros, poder correr y tener un ritmo de partido alto y no pararnos y, cuando nos planteen defensa alternativa o trampa, seguir».
Preguntado por la racha de salidas consecutivas después del duelo ante el Obradoiro y el del martes contra el Peristeri en la BCL (serán cuatro, tres de la ACB), dijo: «La mayor incomodidad de estar jugando fuera, es no estar en tu casa entrenándonos, donde tenemos nuestra oficina, nuestro gimnasio, nuestro vestuario y rutinas. Nos vamos a Los Guindos un mes y esa es la mayor de las incomodidades. Habíamos estudiado entre Le Mans y Bilbao quedarnos fuera, pero volveremos a Málaga para descansar, para que los jugadores estén con sus familias. Entendemos que es lo mejor».
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