Ibon Navarro: «No hice bien mi trabajo; no convencí a mis jugadores de la energía que había que mostrar»

Pedro Luis Alonso

Málaga

Martes, 5 de abril 2022, 23:05

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Con una clara expresión de estar incómodo por el desarrollo de este arranque de eliminatoria, molesto pero contenido, Ibon Navarro asumió su parte de culpa. «Está claro que no he hecho bien mi trabajo, porque no he convencido a mis jugadores de la energía con la que teníamos que afrontar el partido en defensa y en ataque, sobre todo en ataque, que ha sido muy baja», manifestó el técnico del Unicaja. «Hemos hecho nueve tiros de tres de puntos y no hemos pisado la zona por la energía el rival», añadió.

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Dicho esto, lo único positivo que se puede extraer como lectura es el margen de solución cara al futuro. «Tenemos una oportunidad para hacerlo mejor dentro de una semana, para jugar con este nivel de agresividad y el buen baloncesto que ellos juega y aprender de lo que nos ha pasado para que el partido sea completamente distinto», comentó.

Además, destacó que el arranque extraordinario del Manresa en el partido no les debió haber sorprendido: «Este partido era un claro examen para nuestra fortaleza mental, porque sabíamos lo que iba a pasar, que aunque estuviéramos bien ellos iban a empezar con un nivel de agresividad y valentía que no hemos mostrado nosotros. Tampoco hemos aprobado el examen de la dureza mental. Nos hemos diluido, hemos fallado tiros, no pisamos la pintura y no tuvimos ninguna opción».

Mientras, para el entrenador del BAXI Manresa, Pedro Martínez, «la clave fue cómo comenzamos, con el ritmo, como atacamos y defendimos». «A partir de ahí -continuó-, intentamos mantener la concentración, y eso es muy difícil, porque no puedes jugar cuarenta minutos a ese nivel. Lo importante era no cometer errores, saber estar. Ahora recuerdo una falta para un tiro de tres puntos, pero en general el partido ha sido muy completo».

Además, fue sinceró cuando comentó: «Era inesperado lo sucedido porque el Unicaja es muy buen equipo. No estábamos preparados mentalmente para una diferencia tan grande en los primeros minutos. Lo normal es que reaccionaran, pero en el segundo cuarto hemos ganado de uno; en el tercero, perdido de dos, y en el último, perdido de uno, lo que refleja que el resto del partido ha sido muy igualado».