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Pese a los achaques físicos en buena parte de la plantilla, Ibon Navarro valoró el triunfo ante un rival muy trabajado como el Surne Bilbao y al que hubo que desnudar con paciencia. «Fue un partido complicado, como preveíamos. Ellos juegan a un gran nivel ... y en la primera parte lo han hecho. Nosotros hemos fallado dos o tres tiros sencillos bajo el aro y ellos se han encontrado solos debajo de este, comentó el vitoriano, que consideró clave la reacción tras el descanso: »En el tercer cuarto la salida de energía fue muy buena, aunque ellos respondieron bien y eso habla de su nivel. Cuando metimos a Alberto Díaz dimos otro arreón, y hemos recuperado un par de balones bastante buenos para alejarnos«.
Además, consideró vital el impulso dado por los más de ocho mil aficionados en el Martín Carpena en un encuentro tardío (21.30 horas) en víspera de día laborable. "Con la ayuda de la afición, otra vez la energía que nos falta de forma natural nos la inyectan ellos. Décima victoria y a ver cómo llegamos a Tenerife".
Pero Navarro sigue preocupado por las lesiones. Anoche Lima y Brizuela no jugaron. "Estamos en problemas, Darío no pudo jugar, Dylan (Osetkowski) tiene la mano que no la puede usar; Kalinoski se lesionó el tobillo y tuvo que retirarse: aliente estuvo muy bien pero luego le costó. Hemos ajustado la rotación un poco. Carter, en la primera entrada no estuvo bien, pero en la segunda algo mejor"
Finalmente, cuando se le preguntó acerca de la llegada de un sustituto para Lima, una decisión crucial, al ser una baja de larga duración y haber problema de cupos, estuvo irónico en su respuesta: "¿Cuándo son los Reyes? Si vienen los Reyes vendrá a Tenerife; de lo contrario, no".
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