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Con total seguridad, no olvidarán jamás lo vivido este fin de semana. Tres días de reencuentros, sonrisas, nervios y sentimientos a flor de piel, que culminaron, por fortuna, de la mejor manera posible, saboreando de nuevo una gran victoria. Hace apenas unos meses que nació el proyecto del Unicaja Máster Femenino +50, a priori, con un ambicioso objetivo en mente, como fue el último Campeonato de Europa FIMBA. Sin embargo, tal fue el éxito del equipo, que logró un meritorio quinto puesto continental en su debut, que ahora, sus protagonistas no pueden dejar de soñar.
Querían volver a sentir en ellas ese gusanillo de la competición que todas tanto extrañaban, como es normal en un equipo donde el grueso de su plantilla peleó hasta en cuatro fases de ascenso por subir a la élite nacional, bajo el nombre de Tokiauto Asunción (después Unicaja-Universidad de Málaga). Por ello, decidieron buscar un nuevo reto. Y lo encontraron en el III Torneo Las Cortes, en San Fernando, impulsado por el club local +Que Veteranas y el propio ayuntamiento gaditano.
Doce equipos máster de toda España se dieron cita en esta localidad, y pese a ser el de mayor edad, teniendo que lidiar en pista con jugadoras más jóvenes, las cajistas lograron coronarse, a las órdenes de un banquillo inédito, formado por primera vez por el binomio Pedro Ramírez (exentrenador del Unicaja y extécnico ayudante de Javier Imbroda) y Manolo Castillo (exayudante de Imbroda y entrenador del ya mencionado Tokiauto, además de director de SUR).
«Éramos las más mayores, sólo teníamos dos jugadoras de 45 años, el resto, más de 50. Estamos muy contentas, hacía 30 años que algunas de nosotras no jugábamos juntas, así que el reencuentro en pista ha sido muy bonito», comienza relatando una de las coordinadoras del equipo, nombre destacado del baloncesto femenino malagueño: Mari Carmen Morales, que añade: «Nuestro objetivo era, primero, no lesionarnos; segundo, disfrutar del juego, y por último, ganar, por supuesto, así que no podemos estar más contentas».
El torneo comenzó con una fase de grupos (4 grupos de 3 equipos), donde el Unicaja Máster +50 quedó encuadrado con el Basket Aurum de Ferrol y el CB Tortugas de Sevilla. Ganaron ambos encuentros y pasaron a disputar la semifinal, en la que también se impusieron, esta vez a uno de los dos equipos locales del +Que Veteranas. La final de este domingo no pudo ser más ajustada y atractiva. Las malagueñas se midieron al Veteranas Huelva, el combinado más joven contra el más experimentado. «Tenían una base que corría como una bala, pero logramos pararla y hacer una buena defensa», cuenta Morales en tono jocoso.
Tras varias remontadas y con una icónica canasta de Eva en el último segundo del partido, el Unicaja Máster Femenino logró llevarse su primer título, con la emoción añadida de haber vivido tal desenlace del partido. Aunque lo más importante, fue la ambición que estas jugadoras siguen demostrando dentro y fuera de la pista, aun siendo a día de hoy un hobby que compaginan con sus respectivos trabajos. «Ha sido una experiencia muy divertida, sobre todo por ver como las jugadoras mantienen esa entrega y disciplina y la ilusión intacta. Se lo toman muy en serio, entrenamos un día a la semana y van con muchas ganas de ganar», valora Pedro Ramírez.
El equipo estuvo compuesto por: Eva María Albert, María Trinidad Grund, Aranzazu Briales, Belén Sepúlveda, Nicole Meinesz, Patricia Vázquez, Teresa Ruano, Cristina López, Daniela Migliavacca, Mari Carmen Ortega, Beatriz y Amaya Díaz-Larrauri y Andrea Verónica Santa María. En el banquillo, Ramírez y Castillo ejercieron como entrenadores; Cuqui Rodríguez, como delegada y María del Mar Lucio, como coordinadora.
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