Son días felices para Yannick Nzosa. El pívot congoleño del Unicaja cumplió este domingo 17 años y lo hizo participando en la victoria de su equipo ante el Acunsa Gipuzkoa.
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El joven es una de las gratas sorpresas del equipo malagueño hasta el momento. ... Emergió como recurso de urgencia por los problemas en el juego interior y eso le ha permitido ganarse la confianza de Luis Casimiro.
Sus compañeros saben del enorme potencial que tiene y lo miman mucho, por eso quisieron obsequiarle con una tarta de cumpleaños al término del encuentro contra el conjunto vasco. El delegado del equipo, Javi Salvo, le dio la sorpresa al aparecer en el vestuario con el pastel mientras el resto del equipo le cantaba el cumpleaños feliz.
Nzosa disfruta ahora de la arriesgada apuesta que realizó la temporada pasada al aceptar la propuesta malagueña para dejar el Stella Azzurra italiano. El Unicaja echó el resto por él y el jugador dio el paso de venir a Málaga. Salvado el contencioso judicial, el joven tuvo que pasar el confinamiento en un piso del club junto a otros dos compañeros. Gracias a su sensacional rendimiento y después de un año de vértigo, seguro que Nzosa no olvidará este 17 cumpleaños.
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