Encuentro entre aficiones en la Copa del Rey:«La fiesta está por encima de las derrotas»

Para los aficionados al baloncesto malagueño es sábado de resaca tras la jornada del viernes en la Copa del Rey. El Unicaja, vigente campeón, uno de los favoritos en una temporada en la que está jugando de manera sobresaliente, no rindió a su nivel y cayó eliminado ante el Lenovo Tenerife a las primeras de cambio. Palo duro, mazazo, decepción... Son términos válidos para describir lo que vivió la afición local y el equipo en el Martín Carpena. La Copa pierde interés a escala local, es evidente, pero aún quedan dos días de buen baloncesto, de ambiente y de fiesta, mucha fiesta. Lo definía bien este sábado en el Centro de Málaga Javier Salinas, malagueño que acudía con sus amigos al encuentro de aficiones organizado por la ACB: «Estamos fastidiados, claro que sí. Esperábamos por lo menos jugar las semifinales. Pero hay que seguir disfrutando de la Copa, la fiesta está por encima de los partidos y las derrotas», decía.

Fueron muchos los seguidores 'cajistas' que estuvieron en la plaza de la Marina celebrando. Pero, ¿celebrando el qué, si se perdió? Pues que la Copa es en Málaga y que el baloncesto tiene, al menos en España, esa capacidad de juntar a todas las aficiones de equipos rivales y hacer una fiesta conjunta. Con piques y algunos recados, sí; pero sin maldad y con buen ambiente. Centenares de personas se reunieron en la plaza de La Marina para cantar, bailar y hacerse fotos. En definitiva, para pasárselo bien, algo que tendría que ser una máxima en cualquier competición deportiva. Hubo seguidores de los ocho equipos participantes en la Copa, pero también gente de clubes que ni siquiera han competido este fin de semana en Málaga, como el Baskonia -su afición es fija en todas las Copas, juegue o no su equipo-, el Joventut, el Breogán o el Estudiantes, ahora en LEB.

'Los Mihitas', la charanga del Unicaja, tomó las riendas de la celebración, pero también estaban las bandas de animación del Valencia Basket o del Baskonia, por lo que se turnaban para ir subiendo los decibelios en una plaza de La Marina a rebosar en un día primaveral. No faltaron tampoco los seguidores disfrazados que se han visto estos días por el Palacio: los vikingos del Gran Canaria o del Real Madrid, las abejas del Tenerife o el carimástico Remigio 'La Máscara', el aficionado canario que va ataviado como el famoso personaje de la película de Jim Carrey.

Sonó el himno del Unicaja, cantado por muchos aficionados de fuera de Málaga y algunos cánticos clásicos ya en los pabellones de la ACB como el «Era campo atrás» -aquel error del malagueño Dani Hierrezuelo, que no vio una infracción de LLull en la Copa de 2017- o «Árbitro culé», ambos en contra de Real Madrid y Barça, los clubes con más títulos del baloncesto español. Los seguidores del Unicaja no se olvidaron de su líder espiritual actual, Ibon Navarro, y cantaron el «Ibon tiene un plan». El problema es que la afición del Lenovo Tenerife ya ha encontrado respuesta y entonaron «...Y le salió mal, y le salió mal».

Tras media hora de cachondeo, las aficiones se desplazaron de La Marina hasta la plaza de la Constitución inundando la calle Larios de bufandas, banderas y cánticos. La gente lo pasó bien, que es lo importante.

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