El Real Madrid superó al Unicaja en el WiZink Center en un duelo liguero marcado por la mayor solidez de los blancos y el bajo acierto ofensivo del conjunto malagueño. Liderados por la velocidad de Campazzo y la intimidación de Tavares, los locales dominaron gran ... parte del encuentro, a pesar de ciertos momentos de dudas y desorganización.
Publicidad
El inicio fue arrollador para el Real Madrid. La actividad en ambos aros de Ndiaye y la velocidad en las transiciones, impulsadas por Campazzo, llevaron al Unicaja a reajustar rápidamente su quinteto, sentando a Sima por Balcerowski. Sin embargo, el pívot polaco tampoco logró asentarse en el juego. Aunque los ajustes defensivos de Unicaja y la entrada de Carter lograron frenar la ventaja blanca, el bajo acierto desde el triple y la imposibilidad de correr dejaron a los visitantes con sólo 13 puntos al final del primer cuarto.
El segundo cuarto mostró un Madrid menos sólido con Campazzo y Tavares en el banquillo. Un desacertado Rathan-Mayes y el rigor defensivo del Unicaja le permitieron recortar distancias. Tyson Pérez, muy activo corriendo y poniendo mucha energía, impulsó su equipo, mientras que la defensa malagueña complicaba el ataque blanco. Sin embargo, dos triples consecutivos de Llull y Feliz devolvieron la ventaja a los locales.
En el tercer cuarto, el Real Madrid centró sus esfuerzos en evitar las transiciones rápidas del Unicaja mientras continuó alternando su defensa individual con las de zonas, obligándolo al juego estático una y otra vez y retrasando su juego de ataque. La conexión entre Campazzo y Deck, junto a la intimidación de Tavares, les permitió mantener la ventaja, aunque los buenos minutos de Kravish, el mejor de su equipo, y un triple de Ejim mantuvieron al Unicaja en la pelea.
Publicidad
El último cuarto confirmó las dificultades de Unicaja para superar la defensa blanca. Los despistes defensivos y el desacierto en triples (20%) pasaron factura, mientras Campazzo, Llull y un inconmensurable Deck, el jugador del duelo, sellaron la victoria para un Madrid que la necesitaba como el comer. Una tángana inexplicable provocada por Ibaka puso un feo colofón al duelo, disputado pero sin brillantez.
Suscríbete durante los 3 primeros meses por 1 €
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Fallece un hombre tras caer al río con su tractor en un pueblo de Segovia
El Norte de Castilla
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.