La Copa del Rey ya espera al Unicaja

El equipo malagueño llega a la Copa sin nada que perder y sin la presión que tenía en la edición de hace un año cuando fue anfitrión del torneo en el que alcanzó la final frente al Real Madrid. A pesar de esto no puede perder de vista que delante tendrá a uno de los equipos más en forma de Europa.

El Barcelona y el Unicaja se vieron las caras en Málaga al comienzo de la temporada. Fue un choque competido, de hecho el equipo entonces entrenado por Luis Casimiro llegó al descanso ganando por 38-32, pero en el que el cuadro catalán acabó llevándose la victoria del Carpena por 70-79. Ese día Brizuela anotó 17 puntos y Gal Mekel fue el jugador más valorado del Unicaja con 9 puntos y 6 asistencias (18 de valoración).

Muchas cosas han cambiado desde entonces. El Barcelona ha ido a más en su rendimiento, en parte porque tiene una de las mejores plantillas de Europa. La sorpresa ha sido el desplome del Unicaja, que aunque enfila el partido después de una victoria en Fuenlabrada, tampoco se puede esconder el el terrible mes y medio que acumula hasta llegar a la Copa. Las rachas son diametralmente opuestas. Si el conjunto cajista ha ganado dos de los últimos quince partidos entre Liga y Copa, el Barcelona sólo ha perdido en la Liga uno de los últimos catorce encuentros...

La empresa parece imposible para el Unicaja, máxime si se tiene en cuenta que nunca eliminó al Barcelona en una eliminatoria en la Liga o la Copa. El clavo ardiendo al que agarrarse es aquel cruce en los cuartos de final de la Euroliga en 2007 que se decidió en el tercer partido jugado en Málaga con aquel famoso triple de Pepe Sánchez, que el argentino recordaba hace unos meses en las páginas de SUR. Pero para eso están las maldiciones, para romperlas...