Carlos Suárez: «Despedirme en la cancha con la afición es el sueño de cualquier jugador»

El cuarto jugador con más partidos de la historia del Unicaja (437), después de nueve temporadas defendiendo su camiseta, va a ser homenajeado el viernes 7 de septiembre en el Martín Carpena, en el cierre del XIII Trofeo Costa del Sol, en un Unicaja-Baskonia en el que el club de Los Guindos le concede el privilegio de defender una vez más la camiseta verde, como sucediera hace poco con Carlos Cabezas.

«El Unicaja me ha dado muchas cosas. La mejor etapa de mi vida, como deportista y como persona, la he pasado aquí. Me hubiera gustado despedirme en la cancha con la afición y qué mejor manera de retirarme con un entrenador que me ha dirigido como Ibon (Navarro) y contra otro como Pablo Laso (del Baskonia). Es un torneo espectacular. Es el sueño de cualquier jugador y espero disfrutar de ese día, con la afición que me ha apoyado nueve años», declaró este jueves en la presentación del torneo el ala-pívot madrileño.

¿Estará a la altura de la cita Carlos Suárez?: «Sinceramente, no lo sé. Intento estar al nivel de mis compañeros pero sobre todo disfrutar. Va a ser un día muy emotivo y voy a estar disfrutando de esos últimos minutos», dijo el madrileño, que se está preparando estas semanas en la Eshmun y que admitió que Ibon Navarro no le ha pedido aún nada en particular.

Sobre su planes de futuro, Suárez comentó que «quiero un poquito más de estabilidad y quiero estar este año aquí en Málaga. A lo mejor más adelante poder decir ya qué hacer con mi vida». De momento desea acabar con su titulación de técnico y quién sabe si eso le podría abrir las puertas de nuevo en el club de Los Guindos trabajando con la cantera o en alguna parcela del primer equipo. «Como había dicho Antonio (López Nieto), me hubiera gustado despedirme de mi afición, ¿no? -su último partido oficial fue en Barcelona-, pero por las circunstancias, que estuve lesionado, no pude».

Respecto a cómo ve al Unicaja actual, deseó que pueda «volver a levantar otro título». En este sentido, sostuvo que los pocos cambios en tres cursos en la plantilla es algo que «habla muy bien de la temporada que han hecho. «Creo que lo que bien funciona, ¿para qué tocarlo, no? A mi modo de ver está bien hecho. Lo demostraron el año pasado, ¿no?. Todo el mundo a lo mejor opinaba que tenían que fichar nuevos jugadores, cambiar, pero ya lo demostraron en la anterior que hicieron una buena temporada, y el año pasado ya fue extraordinario. ¿Para qué tocar las piezas de que tienen si funcionan? Por experiencia sabemos que si al final tocas esas piezas a lo mejor la siguiente temporada no es tan buena como la anterior», continuó en su argumentación.

Aunque lleva desde el 14 de junio sin entrenarse, pero poniéndose a punto en un gimnasio, Suárez ya tiene claro que la retirada no es reversible. «Era una decisión que ya tenía ya meditada. Y dio la casualidad de que justo ese día me iba al curso de entrenador porque lo quería hacer días antes, pero tenía que hacerlo un poco con ACB, en diez dias y con unas circunstancias. La verdad es que al principio, de momento, lo llevo bien. Sí que me han dicho que cuando ya empiece la gente a jugar partidos te entra esa morriña de esos momentos que tú pasabas jugando como jugador», concluyó.