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La imagen de Carlos Suárez levantando el trofeo de la Eurocup en la cancha de Valencia en 2017 forma parte de la memoria visual del Unicaja. El madrileño recordó a Pablo Ráez con su gesto de 'Siempre fuerte' en una fotografía histórica. Ahora, siete años ... después de aquello, el veterano jugador busca sucesor y sueña con ver a Alberto Díaz dándole el relevo en la Basketball Champions League. Suárez, que pelea con el Movistar Estudiantes por volver a la Liga ACB, analiza para SUR la semifinal contra el UCAM Murcia y todo lo que rodea a una gran cita internacional como la Final Four de Belgrado.
-Le conocemos bien y sabemos que está siempre pendiente de la actualidad del Unicaja. ¿Qué le parece la temporada hasta ahora?
Espectacular, histórica. Ahora mismo hace el mejor baloncesto de la Liga, el más regular. Parece que se caen, pero siguen hasta el final y son un muro en defensa. El Unicaja hace un baloncesto de nivel Euroliga. Sé que hay ese debate en Málaga de si tendría que jugar la Euroliga, pero hacerlo implicaría dejarte algunas victorias en la Liga ACB.
-Las apuestas lo señalan como el gran favorito en la Final Four, pero primero hay que ganar al UCAM Murcia...
-A mi modo de ver, el Unicaja es favorito porque lo ha demostrado durante toda la temporada. Ojo que el Murcia es un equipo duro, que se agarra a los partidos y será complicado, aunque el Unicaja es el favorito entre los cuatro participantes. Por el otro lado, el Tenerife está en un momento de dudas, porque ha tenido varias lesiones como las de Jaime, Salin o Doornekamp. En un partido puede ganar cualquiera, pero ves cómo está jugando el Unicaja y es claro favorito.
-En Málaga hay desatada una locura alrededor del equipo. ¿Cree que estamos ante una plantilla que puede marcar una época?
-Estos dos años han sido muy buenos. Todo dependerá de si podrán mantener el bloque, porque jugando tan bien es previsible que lleguen los grandes tiburones que te pueden quitar alguna pieza. Si tienes que fichar, no sabes si los que llegan se conjuntarán tan bien. Ahora hace el mejor baloncesto de la Liga, pero todo esto depende de los resultados. Si ganas un título, se recordará. La gente de dentro valora el juego y el trabajo, pero desde fuera importan las victorias y los títulos. Esperemos que ganen algo y sería fantástico que Alberto pueda levantar otra Copa. Sería la leche.
-Justo pasó eso cuando se ganó la Eurocup, porque aquel equipo generó dudas después de la Copa de Vitoria, pero se transformó en las eliminatorias europeas...
-Es verdad que en la Copa no estuvimos bien, pero en el general de la temporada la nota fue alta, más allá de ganar la Eurocup. Ahora juegas dos finales, porque si no consigues el objetivo se puede venir abajo el gran trabajo que has hecho en la Champions. En un 'play-off' sí tienes más margen, pero aquí no.
-Además por cómo fue el desenlace de la final contra el Valencia.
Ya te digo, la gente del Valencia estaba cantando el «¡Campeones, campeones!». Nadie daba un duro por nosotros. Recuerdo que Joan Plaza colgó en el vestuario las previsiones de las casas de apuestas para motivarnos... También nos puso un vídeo. Esos momentos en los que el equipo se podía dejar, fuimos todos a una y ganamos. El Valencia llegó a todas las finales y ganó la Liga. Hicimos un último cuarto memorable.
-¿Visualiza a Alberto Díaz tomando el relevo levantando el título de la Champions?
-¡Sería fantástico que Alberto levantase el trofeo! Es verdad que la situación es diferente, porque ahora se les exige que ganen y eso no es justo, porque esto es deporte. El Unicaja se ha ganado el respeto y la gente está en su derecho de opinar que debe ganar, pero no va a ser fácil.
-Volviendo al detalle de la motivación que hizo Joan Plaza, ¿el aspecto solidez mental puede hacer que se superen problemas físicos o el cansancio?
-Creo que sí. Te puede doler todo el día anterior, pero llega la hora del partido y no te duele nada. Al final la mente es muy caprichosa. El trabajo del entrenador es importante y me consta que Ibon Navarro ya lo está haciendo porque así pasaba cuando yo coincidí con él. El hecho de no jugar en Málaga va a ayudar en el buen sentido, porque el equipo tuvo una presión extra en la Final Four del año pasado y en la Copa. Parecía que por el hecho de jugar en casa ya tenía la obligación de ganar. He jugado en casa con el Unicaja y el Madrid y siempre existe esa presión. Ahora no la tendrá.
-¿Cuáles son sus planes de futuro? ¿Veremos al Estudiantes en la ACB?
Tenemos tres partidos y tenemos que quedar entre los cinco primeros. Nos tocaría el noveno por haber ganado la Copa de la Reina, pues nos tocaría el último clasificado del 'play-off'. Será complicado estar en la Final Four y luego la final. Es difícil, ya lo viví el año pasado con el Burgos. La Leb Oro es complicada. Perdimos la final contra el Palencia. Tenemos la presión de subir después de tres años en la Leb. Debemos tener más regularidad y a ver si recuperamos a algunos jugadores que tenemos lesionados. Francis (Alonso) está con ritmo y a ver si podemos subir.
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