Carlos Cabezas, broche de oro a una carrera formidable

El ya exjugador malagueño anunció su retirada de las canchas a finales del mes de agosto y lo hizo como era su deseo, vistiendo la ... camiseta del Unicaja. Cabezas y el club de Los Guindos se pusieron de acuerdo para que el base disputase el último partido de su carrera en el Torneo Costa del Sol ante el Real Madrid. El marbellí ponía así fin a una exitosa carrera profesional en la que ganó la Copa Korac, la Copa del Rey de 2005, la Liga de 2006 con el Unicaja, además de ser campeón del mundo con la selección española en el Mundial en 2006. De forma paralela a aquel partido tan emotivo, también quedó pendiente la retirada del dorsal de Cabezas con el número 10, el que lució durante su etapa en Málaga, una ceremonia muy emotiva que se celebró en el encuentro contra el Barcelona el 24 de octubre. Tras dejar el Unicaja en 2009, la carrera del malagueño destacó por no importarle abrirse a otros países. Gracias a su excelente físico y a que siempre le respetaron las lesiones, Cabezas ha estado en activo hasta los 41 años. Además de jugar en el Khimki ruso, también pasó por Francia, Venezuela, Argentina, Hungría y Venezuela, su último destino en el Nacional de Montevideo fue muy especial para él porque le permitió jugar en el país de su padre. Cabezas es ahora embajador del Unicaja, al que representa al club en actos institucionales junto a Berni Rodríguez, por lo que su regreso a Málaga ha sido completo y como él deseaba desde hace años.