El choque emocional de Brizuela: «Con ganas de ver a muchas personas y de que no disfruten del partido»

Darío Brizuela será el gran protagonista del encuentro de este miércoles entre el Unicaja y el Barcelona. Aunque ya estuvo en Málaga con la selección española el pasado verano, el escolta vasco jugará por primera vez contra el equipo malagueño tras su salida del club en verano después de que el conjunto catalán abonase su cláusula de rescisión. Se espera que la afición cajista lo reciba con una gran ovación y mientras Brizuela vive en un conflicto emocional, según reconoció ayer antes de que su equipo se desplazase a Málaga. «Tengo muchas ganas de ver a muchas personas conocidas, pero, bueno, también con muchas ganas de ganar y de que no disfruten del partido», ironizó.

El escolta elogió la temporada de sus excompañeros, que de ganar firmarían la mejor racha histórica del club en la élite, con doce triunfos seguidos. «Ellos están jugando muy bien, están batiendo récords en la ACB y ganando partidos como si fueran un rodillo. Los conozco muy bien, pero creo que nosotros también tenemos muy buen equipo y que va a ser un partido igualado. Sabemos que en el Martín Carpena tienes que hacerlo muy bien y sacarles de su ritmo de juego para poder competir», explicó el jugador de San Sebastián.

Brizuela jugó tres temporadas en el Unicaja, con el que jugó la final de la Copa en 2020, fue campeón del torneo en 2023. El club cajista pagó 350.000 euros al Estudiantes por su fichaje en la Navidad de 2019, justo antes de la pandemia, y el verano pasado ingresó 1,2 millones por su traspaso al Barcelona. Fue poco después de que el escolta hubiese renovado con la entidad cajista por tres temporadas. Fue una decisión difícil, pero asumida por todas las partes. El jugador daba un salto en su carrera y el Unicaja hacía caja.

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