Álvaro Mena, otro gran talento de Los Guindos

En el Unicaja se ha hablado este estío del talento de Mario Saint-Supery, MVP del Eurobasket sub-16. También del de Álvaro Folgueiras, subcampeón mundial sub-17 y que ahora emigra a la DME Academy, en Florida, para seguir unos años su formación en los Estados Unidos. Y junto a este, en ese exitoso Mundial celebrado en Málaga estuvo también el alero mallorquín Rubén Vicente.

Este, Saint-Supery y Baboucar Badji acompañaron a Álvaro Mena el pasado fin de semana en Lisboa para completar la rotación de jugadores del Unicaja, con sólo siete hombres, y entre todos ellos a la postre emergió la figura de Mena, que asombró con su desparpajo en el duelo del domingo ante el Coosur Betis: 12 puntos, 2/2 en triples, dos asistencias, dos recuperaciones y tres faltas recibidas, para un total de 14 puntos de valoración en 19:03 minutos en la pista.

A sus 16 años aprovechó la oportunidad que le brindó Ibon Navarro, aunque debe de ser el primero consciente de que aún le queda para soñar con dar el salto, empezando por terminar de moldear su cuerpo, que aún es el de un adolescente en crecimiento. «Su físico está cada vez está mejor», matiza no obstante el que está siendo su preparador en el conjunto júnior de la Liga EBA, Antonio Herrera. «Al tener ya piernas fuertes eso le da para una intensidad defensiva ante jugadores ya formados. Cuando el año pasado iba con el equipo ACB a entrenar en las ventanas (de la FIBA) le costaba más en los contactos», añade. Herrera destaca ante todo la «pasión por el baloncesto» de este 'playmaker' de 1,84 metros. «Lo vive con mucha intensidad. Estudia incluso a jugadores de su posición, porque quiere mejorar», desvela.

Para el preparador es más un base que un escolta, ni siquiera un 'combo' de los que se estilan tanto hoy: «Tiene talento natural para ver el baloncesto en la pista, sobre todo para su anotación. Además, tiene buenos fundamentos, tira y pasa muy bien, amén de contar con un buen manejo de balón». Lo demostró con creces en una excelente acción individual que acabó en bandeja ante el Betis, o en otra penetración tras robo.

«Es un base anotador, capaz de hacer de todo. Un 'uno' de campo abierto, de tiro moderno, con lanzamiento de tres. Lo tiene todo para seguir con su proyección actual», ratifica Herrera, que recuerda que fue su base titular en el curso anterior en la Liga EBA, con el Unicaja clasificado para la complicada fase de ascenso a la LEB Plata, empresa que no llegó a culminarse ante rivales con mucha más experiencia.

Mena promedió 9,9 puntos y 1,9 asistencias por partido, con 5 puntos de valoración, en algo más de 19 minutos en pista en la pasada campaña en la EBA. Fue uno de los pilares de una excelente hornada que ahora se asoma a un abismo a medio o corto plazo: el salto a sénior como profesional, sin categorías intermedias de formación y la tentación de las universidades norteamericanas para absorber ese talento.

Frente a los diez minutos jugados por Saint-Supery o los siete de Vicente el domingo ante el Betis, Álvaro Mena acabó mereciéndose esa confianza de Navarro por su acierto en pista y podría repetir ahora en el Torneo Costa de Sol, ausentes aún Alberto Díaz y Kendrick Perry.