Secciones
Servicios
Destacamos
En condiciones normales Alberto Díaz (Málaga, 1994) alcanzará la treintena en el Unicaja (firmó hasta 2024). Y también en condiciones normales el club habría presentado a bombo y platillo su apuesta en rueda de prensa, pero la pandemia ha frenado este acto. Por eso era ... obligado conocer sus sensaciones. El base ídolo de la afición cajista no oculta su felicidad por su continuidad, aunque reconoce que fue un acuerdo nada confictivo.
-¿Se vuelve a sentir como un niño con zapatos nuevos?
-El Unicaja y yo tenemos una armonia, un vínculo muy fuerte, es el equipo de toda mi vida. Estoy muy contento de poder estar cuatro años más aquí y ha sido todo muy sencillo.
-Es como el gran contrato de su vida. Coincide con su madurez...
-Es en la plenitud fisica donde uno encuentra sus mejores años. Confío en que no sean sólo esos, también los siguientes.
-Durante su etapa en Bilbao o Fuenlabrada, ¿sonaba difícil pensar en ello?
-Sí. Era como un sueño, algo que podía ver de lejos, que quería y deseaba y pensaba que lo más probable es que no sucediera. Nuestros caminos se han unido y ambas partes estamos contentas.
-Con lo difícil que es ver producto nacional en la ACB, en el Unicaja va a haber tres canteranos en la plantilla, con usted, Rubén Guerrero y Francis Alonso.
-Este es un deporte con un mercado muy abierto, donde hay mucha exigencia. La dificultad de que los jóvenes den ese paso al primer nivel es alta, pero en el Unicaja se está haciendo un gran trabajo y se está notando en los exjugadores que tiene en la ACB y en el equipo.
-¿Que cosas le siguen ilusionando lograr con este equipo?
-Jugar cada día en el Martín Carpena ya de por sí es ilusionante. Hacerlo delante de tu gente, de tus amigos, de tu ciudad... Pero uno siempre tiene la ambición de conseguir algo más: ganar títulos.
-Si tuviera que elegir un partido de verde, ¿sería el de la increíble remontada final para ganar la Eurocup ante el Valencia?
-Hay varios partidos. Ese podría ser uno. También el de cuartos de final contra el Bayern Múnich en casa... Hay muchos encuentros que se te quedan en la retina. Recuerdos que jamás se olvidarán.
-Hablando de citas clave: la pasada campaña hubo dos sobre todo. En la final de la Copa parecía difícil hincarle el diente a un Real Madrid a ese nivel, pero ¿sigue doliendo el partido perdido ante el Baskonia, al que se tuvo contra las cuerdas?
-A todos nos duele. Veíamos elpase a semifinales. Esto es deporte. Hay que aprender de ello. A todos nos gusta ganar siempre, pero igual que remontamos en la final de la Eurocup ante el Valencia, esa vez nos tocó cruz, perder y pasar página. Aprender.
reflexión sobre la pandemia
-Porque de esos duelos es de donde más se aprende, ¿verdad?
-Es como todo. Son las dos caras de la moneda. En la final de la Eurocup perdíamos de 13 a falta de cinco minutos y le dimos la vuelta y nadie se acuerda del otro equipo. Son momentos de tensión, momentos clave, y es cuando ganas experiencia.
-Hablemos de Francis Alonso, un canterano atípico, que llega ya con 24 años al equipo.
-Es un jugador que está suficientemente preparado para competir a este nivel. Ya ha sido profesional: Fuenlabrada, Oviedo... Viene de una universidad en la que pudo jugar ante 7.000 u 8.000 personas. Sabe estar con presión. Nos va a ayudar mucho.
-Pero menudo debut el suyo el miércoles, con ese 8/8 en triples...
-Tienes que meterlos. Demuestra el talento que tiene. Impacta. Es una gran estadística, pero no hay que ir con esa presión, no hay que metérsela. Que las cosas fluyan. Es una alegria para todos, pero tiene que estar tranquilo.
-Todo el mundo coincide en lo mismo. Va a ser un plus que se mantenga casi todo el bloque de la plantilla. ¿Quizás ha faltado paciencia en años anteriores por confiar en un mismo grupo?
-Haber cambiado poco es algo muy beneficioso. Hemos creado un gran grupo, con mucha química dentro y fuera de la pista, y eso nos ayuda a cohesionarnos mejor. Vas avanzando pasos que en otras temporadas no podías dar a estas alturas.
-¿Hay que ser por ello más optimista con este proyecto?
-Tenemos claras nuestras expectativas, nuestro objetivo. El público siempre exige lo mismo. Esto es deporte. La exigencia la ponen otros. Van variando según la persona.
Proyecto con pocos cambios
-¿Qué cree que les puede aportar Abromaitis?
-Es una persona muy comprometida. Es ágil, fuerte, rápido, muy polivalente. Puede hacer muchas cosas en la cancha y su conocimiento del juego nos va a permitir que demos un plus jugando.
-A mi modo de ver este Unicaja ha sido capaz de dar niveles muy altos en momentos clave, pero le ha faltado regularidad, sobre todo en los dos últimos cursos. En el anterior, no se entró en la Copa por méritos propios y la pandemia sorprendió al equipo fuera de los 'play-off'.
-La Liga ACB ha demostrado que está muy igualada. Cada uno puede perder con cualquiera. La memoria del deporte es muy corta. Se habla de rachas buenas y malas, de no cumplir objetivos... Cuando ganamos la Eurocup vencimos en once partidos y perdimos once. No parecía una buena temporada. Es una mira muy selecta. El Baskonia quedó octavo y fue campeón de Liga. Tenemos que buscar una regularidad y ser muy sólidos, sí, pero hay que saber el nivel de exigencia.
-¿Equlibrar la aportacion exterior e interior del equipo puede ser el gran reto?
-Creo que tenemos muy buenos interiores. El equipo va a estar equilibrado. Es lo que hay que buscar. No sólo por los pívots, sino por los pequeños buscando a los grandes en ciertos momentos.
-¿Confía en el normal desarrollo de las dos competiciones?
-Nosotros trabajamos en el día a día para eso. Nadie sabe lo que puede pasar. Deseamos que sea una temporada normal, que el público vuelva lo antes posible. Es una incertidumbre mundial.
-¿Cómo es competir sin público?
-Las sensaciones son muy raras, como en un campo neutral.La afición hace mucho, pero también cuando un jugador se mete en la pista estás muy concentrado y te das menos cuenta de la inmensidad. Pero el Carpena lleno es brutal y te da un plus.
-¿Qué reflexión hace de lo que está sucediendo en esta crisis?
-Que hay que valorar las cosas que tenemos. A veces estamos inmersos en nuestra rutina y no nos damos cuenta de la importancia de la vida, de disfrutar de cada momento, de respirar aire sin mascarilla, que ahora parece una locura. Es lo que nos ha tocado. Esto ha marcado a la humanidad. Hay que vivir con ello y recordarlo. Frente a los fallecidos y los que lo han pasado mal tenemos que valorar el buen estado de salud y la suerte que tenemos.
-¿Cree que el malagueño está dando ejemplo?
-Hay de todo. Es complicado generalizar. Casi todos los malagueños se estan comportando de manera ejemplar. Hay que seguir así. Hay casos, pero como en cualquier lado.
-¿Cómo ocupó el tiempo libre en el confinamiento?
-El mayor tiempo lo dedicaba a mantener la forma, pero me formé en otras parcelas. Hice un curso de edición máster en Educación y otro de entrenador. Las series y películas no te llenan del todo. No sé cómo acabará mi futuro. Intento formarme en lo que pueda. Luego elegiré.
-¿Cuantos pelirrojos hay en su familia?
-Ninguno. Dicen que tengo bisabuelos o tatarabuelos así por una rama, pero mi padre es rubio y mi hermano es rubio.
-¿Tiene alguna mascota?
-Me gustan, pero con el tema de los viajes, de estar fuera mucho tiempo, no sería responsable dejársela a alguien.
-Un concierto que no se perdería jamás.
-El Canto del Loco, aunque ya se hayan separado, o Leiva.
-¿Ha llorado viendo cine?
-Sí.
-¿Cuál es la comida favorita que le hace su madre?
-Tortilla de patatas.
-Un profesor que le haya marcado en la escuela.
-Diría Pedro Pablo, del Rosario Moreno.
-Diga otro deporte que se le dé bien practicar.
-El ciclismo. En el pádel no soy bueno
-¿Semana Santa, carnaval o Feria de Málaga?
-Feria de Málaga.
-¿Playa o piscina?
-Playa.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.