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Casi los mismos turistas que en los meses de julio y agosto que antes de la pandemia, pero unos viajeros que han gastado más en ... sus estancias en Andalucía. Este es el resumen del balance que ha realizado el consejero de Turismo, Cultura y Deporte, Arturo Bernal, en una comparecencia en la comisión parlamentaria para valorar el comportamiento de la industria turística en la Comunidad durante este verano. Dos cifras son claves: la llegada de 11,1 millones de turistas, es decir sólo tres puntos por debajo del registro de 2019, año récord en toda la serie histórica; y el aumento hasta los 8.220 millones de euros del gasto de los viajeros en las provincias andaluzas, lo que supone un 7% más que en el verano anterior a la crisis sanitaria.
«Estos resultados son fruto del trabajo constante realizado para crear la confianza de que Andalucía es un lugar seguro, de la mayor presencia en foros, eventos y ferias nacionales e internacionales que nos ha servido para difundir nuestra oferta y vender la imagen de Andalucía y la capacidad para demostrar la excepcionalidad de nuestro destino, con la calidad de nuestras playas, la oferta cultural y deportiva», ha recalcado Bernal.
Durante su intervención ha señalado que en los meses de vacaciones por excelencia, julio y agosto, se ha recuperado el 97% del turismo del mejor ejercicio de la industria. «Ello demuestra la fortaleza de nuestro destino y la excelencia de nuestro profesionales y trabajadores. Ellos han sido los artífices de esta recuperación tan rápida», ha detallado el consejero.
También ha puesto en valor la importancia del turista español como gran artífice de este balance. En este sentido, ha explicado que de los más de once millones de turistas, el 72% fueron nacionales y el 27% eran extranjeros. «Además de que seguimos siendo el destino preferido para el mercado español por delante de las islas y Cataluña, empezamos a recuperar nuestra cuota de visitante internacional ya que el incremento respecto al año pasado es de más de un 9%», ha matizado. Asimismo, ha manifestado su confianza en la recuperación de estos viajeros extranjeros. «En cuanto se han eliminado las restricciones de movilidad, volvemos a ser una prioridad para los visitantes foráneos», ha insistido Bernal. Lo que se suma a que el tirón de llegadas de españoles a los destinos andaluces ha provocado que ya se haya superado el número de pernoctaciones registradas en el verano de 2019, el último previo a la pandemia.
Es más, ha resaltado el potencial de los destinos y la confianza que en ellos han mostrado las aerolíneas. Arturo Bernal ha aportado el dato de que durante este verano se han ofertado 4,8 millones de asientos en vuelos, lo que ha supuesto un incremento de más del 25% respecto al 2021.
En cuanto al gasto, el consejero ha destacado el avance en la estrategia de lograr un viajero de más calidad, dejando de pensar en la cantidad de turistas para centrar los esfuerzos en que los que elijan Andalucía para sus vacaciones dispongan de una mayor capacidad de desembolso. Los datos así lo avalan. El gasto turístico de este verano, que asciende a 8.220 millones de euros, un 32% mayor en tasa nominal respecto a 2021 y casi un 7% más que en el verano de 2019, supone que el desembolso medio del turista al día se ha incrementado en 4,66 euros hasta alcanzar los 74,79.
Pero además, los viajeros han alargado sus estancias en Andalucía hasta rozar una media de diez días, es decir, un 0,8 día más respecto al pasado año.
Bernal ha dejado claro que ninguna provincia se queda atrás en esta reactivación del turismo: «En lo que respecta a los datos del periodo estival en los establecimientos hoteleros, todas las provincias andaluzas presentan resultados positivos tanto en viajeros como en pernoctaciones».
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