El turismo de interior de la provincia aporta ya casi mil millones de euros en ingresos

En una nueva jornada de caos por la huelga del taxis, la Feria de Turismo de Madrid (Fitur) llegó ayer a su ecuador en las jornadas exclusivas para profesionales. Fue un día intenso en contactos entre empresas, en presentaciones de nuevos productos y en el desembarco de líderes políticos, el del PP, Pablo Casado, y la ex presidenta de Andalucía, Susana Díaz, que revolucionaron el expositor andaluz. Con más afluencia de profesionales que en otros años, pese a que los taxistas están haciendo lo imposible para complicar el acceso a la feria, el presidente en funciones de Turismo Costa del Sol, Francisco Salado, dio a conocer ayer el tirón del turismo de interior en una provincia que ha conseguido lograr con este producto un complemento ideal para el sol y playa y un elemento para desestacionalizar y dinamizar los pueblos malagueños.

Los datos hablan por sí solos. Los alojamientos del interior recibieron el pasado año más de 1,1 millones de turistas, casi un 3% más que un año antes. Unos turistas, que permanecen en el destino más de seis días de media, y que generan un impacto económico de casi mil millones de euros, dos puntos más. «Estamos de enhorabuena en la provincia. La Costa del Sol como destino de interior camina hacia adelante con cifras que avalan su papel decisivo en la gestión de la estacionalidad», señaló Salado, que apuntó al Caminito del Rey, la Gran Senda y los Dólmenes de Antequera como los tres revulsivos que han puesto de moda las estancias en los pueblos en los que la playa se convierte en un complemento cercano, pero no en el principal reclamo.

La dinamización de este sector ha supuesto, según el Observatorio de Turismo de Interior, la creación de 11.200 puestos de trabajo. Y es que al calor de este negocio, los pueblos malagueños se han sumado al carro del turismo a un ritmo de vértigo. Salado explicó que en los últimos cinco años, desde 2013 a 2018, el número de establecimientos turísticos se ha disparado un 150% y el número de plazas ha crecido un 70%. En este sentido, apuntó que en la actualidad la oferta es de 3.948 alojamientos que suman 37.113 camas, un volumen que representa ya el 12% del total de plazas de la provincia. En este fuerte repunte también ha tenido un gran impacto las viviendas con fines turísticos, que en el último ejercicio han aumentado un 87,5%, seguido de las viviendas turísticas rurales, con un incremento del 20% y las casas rurales con una subida del 13,6%.

El presidente de Turismo Costa del Sol en funciones avanzó la apuesta de esta empresa pública en la promoción de la oferta de interior malagueña- «Queremos seguir contrarrestando la estacionalidad, porque sigue siendo un reto estratégico para el destino, que nos conduce a un mayor gasto del visitante y, por tanto, a incrementar el impacto económico del turismo y el fortalecimiento del empleo», dijo. Para ello, anunció que Turismo Costa del Sol destinará este año una partida de 186.200 euros en acciones exclusivas para poner en valor este segmento. A este presupuesto, añadió los casi 460.000 euros en acciones multisegmento, a lo que se suma la inversión en viajes de familiarización y a estudios de inteligencia turística relacionados con el interior para mejorar su competitividad. Salado reconoció «el esfuerzo y empeño puesto por la entidad, las instituciones y los empresarios privados para poner en valor el interior de la provincia en el lugar que se merece».

Esta oferta de interior es clave para aumentar la llegada de turistas españoles a la Costa del Sol, en la que el interior saca músculo y tira del litoral en los meses de temporada baja, convirtiéndose en un complemento ideal.