Ryanair cierra dos bases y anuncia recortes para el verano por la crisis de los B737Max

La aerolínea irlandesa Ryanair, que es líder en el aeropuerto de Málaga en volumen de pasajeros, frenará su crecimiento y cerrará otras dos bases de operaciones, en este caso fuera de España, por la crisis de la prohibición mundial de los aviones Boeing 737Max. La compañía anunció ayer que recibirá sólo diez de las veinte entregas de este modelo de avión previstas, lo que provocará el cierre de dos bases y la reducción de su capacidad durante el verano en otras bases.

La aerolínea de bajo coste ha explicado que cerraría sus bases en Nuremberg (Alemania) y Estocolmo Skavsta (Suecia) el próximo mes de marzo. Además, la compañía ha revisado a la baja su previsión de tráfico de movimiento de pasajeros para todo el año 2021, pasando de los 157 millones a 156 millones.

«Lamentamos estos dos cierres adicionales de bases y pequeñas reducciones de capacidad en otras bases que son debido a nuevos retrasos en la entrega de nuestros aviones Boeing MAX», ha informado el consejero delegado de la principal aerolínea de Ryanair, Eddie Wilson.

Según el directivo, la compañía sigue trabajando con Boeing, sindicatos y aeropuertos afectados «para minimizar estos recortes de capacidad y la pérdida de puestos de trabajo».

La compañía atribuyó la revisión de su programa de verano 2020, en el que ya había anunciado un descenso del 1% en la capacidad ofertada en Europa para la próxima temporada alta, así como el consiguiente ajuste, a la recepción de sólo diez aviones B737Max en lugar de los veinte previstos anteriormente.