Turistas ayer por el Centro Histórico de Málaga, que nota la ausencia y las cancelaciones de los británicos. Ñito Salas

El impacto de la cuarentena británica lastrará el turismo en la Costa del Sol hasta el verano de 2021

El último informe de este mercado publicado por Turespaña recoge que son Turquía y Grecia los destinos alternativos a las vacaciones en España

Pilar Martínez

Málaga

Viernes, 7 de agosto 2020, 00:18

La cuarentena británica pasará factura a la Costa del Sol más allá de esta temporada alta. El último informe de este mercado publicado por Turespaña, con datos actualizados al pasado 3 de agosto, dibuja un preocupante panorama en el mercado que es el principal emisor internacional para la provincia y uno de los destinos clave en España para los británicos. La pérdida de los viajeros ingleses se deja sentir en el aeropuerto de Málaga, en el que viene a representar el 30% de los pasajeros que llegan a esta infraestructura, y en los alojamientos de la Costa, en la que vienen a suponer más del 25% de los clientes.

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Este informe alerta de que la decisión del Reino Unido de imponer dos semanas de cuarentena a quienes procedan de España lastrará el turismo este invierno e, incluso, el verano 2021. Turespaña advierte que tras esta restricción «se han producido numerosas cancelaciones y una caída en las reservas, tanto para esta temporada de verano, como para las temporadas de invierno 2020/2021 y verano 2021».

Los profesionales apuntan a que este impacto irá incluso más allá de lo vaticinado por Turespaña, organismo de promoción del país dependiente del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo, argumentando que estas cancelaciones conllevan una fuga de turistas a otros destinos competidores con capacidad para fidelizarlo como ya hicieron en la Costa cuando la avalancha de turistas extranjeros prestados de los destinos afectados por la Primavera Árabe. «Es fácil cambiar de destino pero no tanto recuperarlos», señala el presidente de los hoteleros de la Costa del Sol, Luis Callejón Suñé, a lo que el presidente del Consejo de Turismo de la CEA, Miguel Sánchez, añade el trabajo extra que conlleva volver a posicionarse cuando los operadores comienzan a mover a los turistas hacia países competidores. «Esto es cuestión de mucho tiempo», destaca.

El informe de Turespaña señala claramente quienes han salido ganando en este río revuelto de relaciones entre España y Reino Unido. La última ficha de mercado apunta que las anulaciones de vacaciones en los destinos españoles han sido en favor de claros competidores, principalmente Grecia y Turquía.

Para recuperar este mercado será clave volver a ser líderes en conexiones aéreas. Sin embargo tampoco este asunto parece fácil de solventar. Turespaña avanza que «las capacidades aéreas para la presente temporada de verano ya reflejaban, antes del anuncio de la nueva cuarentena, una caída del 56% con respecto a las existentes en 2019 y del 58% para la próxima temporada de invierno, comparada con las existentes en la de invierno 2019/2020».

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El informe recuerda que tras la cuarentena británica el principal touroperador, TUI, y la que es la quinta aerolínea en viajeros en el aeropuerto de Málaga, Jet2.com, anunciaron la suspensión de sus operaciones hasta los próximos días 16 y 17, respectivamente, truncando una tendencia al alza en la recuperación inicial de la conectividad aérea, con la ampliación de vuelos por parte de todas las principales aerolíneas: Ryanair, easyJet, British Airways, Iberia, Vueling, Wizzair, Jet2 y TUI. Un escenario muy diferente al descrito ahora por Turespaña: «únicamente operan vuelos de TUI y Jet2.com para traer de vuelta a sus clientes. El resto de compañías aéreas están modificando sus programaciones y se espera cancelen numerosos vuelos».

Turespaña deja claro que todos los agentes coinciden en que «el sector no iniciará una recuperación significativa hasta la primavera de 2021, no llegando a los niveles de 2019 antes del año 2022 o 2023».

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Otro de los aspectos más preocupantes para el sector de la Costa del Sol es el daño en la marca y en la valoración turística de los destinos españoles, afectada desde el momento en que se impone la cuarentena.

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