Borrar
Balneario Municipal, 1969, Torre del Mar
Balnearios en Torre del Mar en los años 60-90

Balnearios en Torre del Mar en los años 60-90

Miércoles, 23 de septiembre 2020, 01:29

Ya hemos explicado cómo el balneario «Baños de Octavio» fue el más famoso de Torre del Mar, inaugurado en 1929. Un año antes, 1928, había un balneario llamado «San José de la Montaña», que pronto fue absorbido por aquel. A continuación relataremos la historia de los otros balnearios establecidos en las playas de Torre del Mar en el periodo desde 1934 a 1990.

En abril de 1934 Manuel Pastor Segovia solicitaba permiso al alcalde de Vélez-Málaga para instalar unos baños (balnearios públicos) en la playa de la barriada de la Caleta de Torre del Mar. Adjuntaba un plano en el que se observaba que el balneario constaría de ocho casetas portátiles, y se establecería sólo durante el verano.

Después de seguir los trámites oportunos en las distintas instituciones, finamente el 6 de julio de 1934, le fue concedido el permiso temporal, siempre que no estorbase a las faenas de la pesca ni el libre tránsito por la playa. Fue inaugurado con el nombre de «La Costa Azul».

Balneraio 'El Yate'

El 14 de noviembre de 1961 Rodrigo Vivar Téllez magistrado del Tribunal Supremo y Cristino Pareja Pérez solicitaban permiso al ingeniero jefe de Puertos para ocupar una parcela de la zona marítimo-terrestre, en la playa de Torre del Mar, para construir un balneario, cuyo emplazamiento era exactamente el mismo que ocupaba, mediante autorización temporal, el balneario denominado «El Yate».

Se remitieron por parte de la jefatura de Puertos al Boletín Oficial de la Provincia y al diario Sur, los anuncios relativos a la concesión administrativa. Éstos estuvieron expuestos al público, y el 28 de febrero de 1962, y el alcalde de Vélez-Málaga expidió un certificado diciendo que durante ese tiempo no se había presentado reclamación alguna contra el mismo.

La tramitación siguió su curso, y suponemos que se otorgaría la concesión temporal para algunos veranos.

Plano del Balneario El Yate (1962)

Balneario situado en la playa 'El Copo'

Luis Díez Ruiz, el 5 de diciembre de 1969, solicitaba permiso para instalar un balneario en la playa de Torre del Mar, en lugar conocido por playa «El Copo». Adjuntaba plano y memoria del arquitecto José María Garnica Navarro, fechado en octubre de 1969. El solicitante aclaraba que venía instalando desde hacía varios años, con carácter temporal, un balneario desmontable. Por ello, solicitaba permiso para conseguir una concesión permanente. Se trataba de ocupar una superficie de 336'92 m2.

Se proyectaba construir un restaurante, un guardarropa común de 2'80 x 4'00 metros, cuatro cabinas individuales. También se instalarían sombrillas, hamacas, tumbonas, etc., delante de la zona a ocupar, como asimismo una terraza lateral para servicio de bar y restaurante. Tendría, además, duchas al aire libre y dentro de una caseta, y servicios. El presupuesto ascendía a 403.422'90 pesetas.

El expediente siguió la tramitación pertinente en este tipo de instalaciones, y así, fue expuesto al público en enero de 1970, lo que motivó una serie de reclamaciones. La primera de Enrique Amado y del Campo quien era propietario de un solar en dicha playa, al que iba a afectar las obras del balneario, ya que tenía solicitado la construcción en dicho solar de un hotel de turismo, encontrándose el proyecto en tramitación.

También perjudicaría al balneario municipal que estaba situado a muy pocos metros a la derecha del emplazamiento que se solicitaba. Hacía Levante estaba instalado, además, el Club Náutico de Torre del Mar.

El 12 de marzo de dicho año el alcalde de Vélez-Málaga informó desfavorablemente el proyecto de balneario permanente, puesto que se trataba de una concesión fija, y a muy corta distancia del balneario municipal. Añadiendo que, mientras no fuese aprobado el Plan de Ordenación Urbana de Torre del Mar, no debían otorgarse más concesiones administrativas sino únicamente autorizaciones temporales.

El propietario enterado de estas reclamaciones, en noviembre de 1970, formuló una serie de alegaciones en defensas de sus derechos. Sn embargo, el Sr. Díez Ruiz no consiguió la probación solicitada de un balneario permanente, y continuó durante unos años montando y desmontando sus instalaciones cada verano.

Balneario Municipal en Torre del Mar

El 20 de abril de 1965 el alcalde de Vélez-Málaga solicitó al Ministro de Obras Públicas, autorización para la ocupación permanente de una parcela en la playa de Torre del Mar, para la construcción en ella de las obras del proyecto de «Balneario Municipal en Torre del Mar».

El expediente fue incoado y comenzaron los trámites oportunos en este tipo de concesión. Después de efectuase la pertinente información pública, sin que contra el mismo se presentasen ningún tipo de reclamación en el plazo señalado. Se solicitó informes sobre este proyecto, y tanto el Ayuntamiento de Vélez-Málaga, el Delegado Provincial de Urbanismo de Málaga, como el grupo de Puertos fueron favorables.

La superficie de zona marítimo-terrestre ocupada con el edificio y sus anejos, resultaba ser de 570 m2. El último informe del ingeniero de Puertos fue emitido el 22 de febrero de 1966, y en él decía que el proyecto podía considerarse de verdadera utilidad y conveniencia pública, ya que la población de Torre del Mar, carecía en absoluto de instalaciones de este tipo, existiendo solamente pequeños merenderos, casetas y toldillos, por medio de permisos temporales.

Memoria del arquitecto y canon a pagar

El canon que debía pagar el Ayuntamiento, según el ingeniero de Puertos, teniendo en cuenta que el valor de los terrenos era estimado en 90.000 pesetas el metro cuadrado, pero considerando el carácter municipal de la obra, y de los beneficios que esta reportarían a la economía general del municipio, proponía reducirlo en un 50%, por lo que le aplicó el valor de 45.00 pesetas por m2. Por la ocupación de 570 m2 a 18 pesetas: 10.260'00. En total resultaría un canon de 32.064 pesetas por m2 y año.

La Memoria presentada junto a los planos de la obra, aparecía firmada por el arquitecto Francisco Estrada Moreno con fecha mayo de 1964. En ella se decía que el edificio estaría emplazado en el Paseo Marítimo en confluencia con la calle del Mar, y en una longitud de 150 metros. El inmueble proyectado sobre una plataforma de hormigón de unos 70 cm. de altura, quedaría situado sobre la cota de las arenas de la playa, para su defensa de los temporales de invierno. Se componía de dos plantas, divididas en tres zonas complementarias, determinadas para distintos usos: a) El balneario propiamente dicho. b) Un bar de planta baja para verano, y se preveía para el uso de bañistas en traje de baño. c) En la planta primera, la llamada zona noble, iría situado un restaurante para personas que no se hallen en traje de baño, y un gran salón para diversos usos: fiestas, conferencias, bailes, etc. El presupuesto de las obras ascendía a 2.502.887'16 pesetas.

En un principio, en febrero de 1966, el ingeniero jefe de Puertos propuso que la concesión se otorgase a título precario, por un plazo de diez años dejando a salvo el derecho de propiedad, sin perjuicio de tercero, y sin cesión del dominio público. Finalmente, la concesión fue otorgada por una Orden Ministerial de 19 de diciembre de 1966 por un plazo de 99 años, a título precario.

Acta de reconocimiento de las obras

El balneario fue inaugurado en el verano de 1967. Sin embargo, inmediatamente empezaron una serie de problemas administrativos. El acta de reconocimiento de las obras fue celebrada el 5 de julio de 1969, y en ella se decía que, si bien el edificio en sí era igual al proyectado, se habían construido aceras, terrazas, aparcamiento y una casa almacén en la parte de Poniente, todo ello de carácter permanente, lo que hacía que la superficie ocupada de zona marítimo-terrestre había variado en relación a la de la concesión otorgada, resultando ser de 1.110 m2.

Se requirió al concesionario para que presentase el proyecto reformado que justificase la ampliación y modificaciones introducidas en febrero de 1970. En vista de que el Ayuntamiento no contestó a este aviso, se volvió a requerir en 1972, y en 1975 se le dio un plazo de tres meses, y en caso de no presentarlo se procedería a la caducidad de la concesión. Esta vez el Ayuntamiento envió el plano reformado solicitado por la Jefatura de Puertos. Dos años después, se resolvió aceptar el plano presentado y aprobar el reconocimiento de las obras. Pero, surgieron más problemas, esta vez con el Ministerio de Obras Públicas, pues el Ayuntamiento no había pagado el canon establecido. El Ministerio de Obras Públicas, vistos los informas de los ingenieros jefes de Puertos y Costas, el 21 de junio de 1978, resolvió se procediese a la incoación del expediente de caducidad de dicha concesión.

El Ayuntamiento, en julio de dicho año, pagó la cantidad de 56.520 pesetas, en concepto de canon atrasado.

Demolición del Balneario Municipal

El balneario siguió su andadura en los años siguientes, pero la asistencia de público iba reduciéndose porque los nuevos tiempos reclamaban otro tipo de baños, y así el edificio fue deteriorándose, y en 1989 se encontraba en muy mal estado. El jefe de Demarcación de Costas, en mayo de 1989, se dirigía al Ayuntamiento -después de derribar el almacén adosado al balneario- comunicándole que debido al mal estado de diversas zonas del edificio, y puesto que se iba a proceder al comienzo de la pavimentación del Paseo junto al edificio en cuestión, proponía su demolición con cargo al presupuesto de las obras del mencionado Paseo.

Al parecer no aceptaron la propuesta y el balneario siguió abierto. Pero el Ayuntamiento, consciente del mal estado del balneario, pidió un informe al arquitecto municipal en enero de 1990. Éste fue negativo, y en vista de que Costa mantenía el ofrecimiento de demoler a su costa la totalidad del edificio, una Comisión municipal, fechada el 29 de enero de 1990, aprobó por unanimidad: 1º) Solicitar de Costas la demolición total del inmueble. 2º) Redactar un proyecto de construcción de un nuevo edificio: dos restaurantes, Puesto de Policía local y una Oficina de Información.

El Ayuntamiento de Vélez-Málaga tenía solicitada la concesión de doce bares restaurantes de playa, de obra fija, y un quiosco de bebidas en el nuevo Paseo Marítimo.

Dicha propuesta era conforme con la vigente Ley de Costas, por lo que el informe de aquella jefatura era favorable, entendiendo que tales bares-restaurantes reemplazarían a los equivalentes previstos inicialmente en el Paseo.

Con la demolición del balneario municipal -y antes del Club Náutico- desapareció el último obstáculo para realizar el Paseo Marítimo en toda su extensión.

Mucho ha cambiado la fisonomía de Torre del Mar, desde aquellos años de finales de los veinte y principios de los treinta, fecha en que empezaron a instalarse balnearios en su actual Paseo Marítimo. Éstos se apoyaban en costumbres ya desaparecidas, y a medida que las autoridades del Estado y las locales ampliaban la superficie de playas para uso público, los ciudadanos preferían instalar su sombrilla y una estera, siempre en torno a una ducha colectiva, y un «chiringuito» que les surta de bebidas y alimentos antes que ir a una casa de baños a la antigua usanza que separe los sexos. Aquellos establecimientos -que cumplieron su misión dignamente- se apoyaban en una concepción social que ya, afortunadamente, no está vigente: en una separación de los sexos y en una diferenciación estamental que ya no se tolera en nuestros días.

Actualmente, desaparecidos estos balnearios, existe un espléndido y extenso Paseo Marítimo en Torre del Mar, con restaurantes y quioscos que surten a toda la población foránea y forastera que aumenta día a día, visitando esta bella localidad malagueña, situada en la Axarquía.

Publicidad

Premios Goya

La quiniela de los premios Goya 2025

Equipo de Pantallas, Oskar Belategui, Borja Crespo, Rosa Palo, Iker Cortés | Madrid, Boquerini, Carlos G. Fernández, Mikel Labastida y Leticia Aróstegui

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

diariosur Balnearios en Torre del Mar en los años 60-90