Manolo y Conchi, vecinos de La Luz, víctimas del incendio en una casa de chapa en Churriana

Según han informado a SUR varios vecinos y conocidos de la familia, los fallecidos tenían entre 69 y 75 años –la información varía en función de la fuente– y llevaban varios años disponiendo de esos terrenos, aunque su residencia principal estaba en la barriada de La Luz, en Málaga capital.

Solían acudir a esa casa de Churriana los fines de semana, aunque con el confinamiento y las medidas restrictivas habían aumentado la frecuencia con la que se instalaban allí. Tenían tres hijos que a veces también acudían a la pequeña finca, donde tenían un huerto, una autocaravana y varios perros –que tuvieron que ser liberados por los efectivos de emergencias que se desplazaron hasta la zona–.

Frente a ellos reside otro matrimonio que se despertó a causa del suceso. «Los conocemos de hace cuatro o cinco años, venían los fines de semana, aunque últimamente estaban más tiempo, venían muchas veces sus hijos y sus nietos», explica ella en declaraciones a SUR. «Estábamos dormidos y me despertó mi perro, me asomé y escuchaba sonidos del incendio; avisé a mi marido y cuando llegamos salía el fuego por las ventanas». Llamaron a emergencias y él trató de localizar a sus vecinos, sin éxito. «Intenté abrir la puerta y no pude, rompí una ventana y tampoco pude porque había una pedazo de llamarada», apunta el vecino.

Andrés Gómez vive en la misma calle que los fallecidos, y también los conocía bien. «Por la noche mis perros empezaron a ladrar, escuché una explosión luego vi un coche de policía subiendo 'a toda pastilla'». Andrés se volvió a acostar, inquieto, y ha amanecido con la «triste noticia». «Eran muy conocidos aquí, habían llegado a un acuerdo con la propietaria de la cantera para poder quedarse en estos terrenos». Desde la empresa indican a SUR que, efectivamente, cuando adquirieron la cantera les permitieron mantener el terreno ya que «no interfería» con la actividad minera.

El incendio se declaró en torno a las dos de la madrugada, momento en el que el 112 registró varias llamadas pidiendo ayuda. Efectivos de la Policía Local, de la Policía Nacional, sanitarios y del Real Cuerpo de Bomberos de Málaga acudieron hasta el lugar de los hechos. No dieron por extinguidas las llamas hasta las seis de la mañana, según los testigos.

Los vecinos habían alertado de que había dos personas en el interior de la casa, aunque no pudieron hacer nada por salvarles la vida. Esta mañana, la Policía Científica de la Policía Nacional se ha desplazado hasta los restos de la vivienda para analizar el entorno y poder dilucidar la posible causa del incendio, para lo que han recibido apoyo de un piloto de dron que ha grabado el paraje desde el aire. Durante el trabajo de los agentes ha sido necesaria de nuevo la presencia de los bomberos, ya que quedaban rescoldos activos en un árbol que, de hecho, se desprendió cerca de los policías.