El detenido por embestir con una furgoneta a tres guardias civiles en Algarrobo no tenía carné de conducir

La huida de un joven británico por la A-7 después de robar una furgoneta en Motril ha dejado cinco guardias civiles heridos, tres de ellos al embestirlos durante la persecución cuando se encontraban a la altura del término municipal de Algarrobo. Las fuentes sanitarias consultadas por este periódico han precisado que uno de los agentes de la Benemérita se encuentra muy grave, ingresado en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del Hospital Regional de Málaga.

Las alarmas saltaron sobre las 11.30 horas de ayer. Entonces se producía el robo de la furgoneta, que pertenece a la empresa Grupo López Pardo S. L. de Vélez-Málaga. Fue sustraída en la zona de la playa de Motril, en Granada, cuando un repartidor entregaba un paquete a un cliente de un restaurante, dejando el vehículo abierto. Nada más percatarse de la sustracción, dio el aviso a las autoridades, por lo que de forma inmediata se montó un amplio despliegue policial para detener al presunto ladrón.

La Guardia Civil no tardó en dar con el sospechoso y se inició una persecución por la autovía en sentido Málaga, que finalizó en el punto kilométrico 277 de la A-7, situado en el término municipal de Algarrobo. Las fuentes consultadas por este periódico han explicado que una patrulla del Grupo de Intervención Rápida (GIR) de Rincón de la Victoria, compuesta por dos agentes en prácticas y un veterano, fue movilizada para interceptar al conductor de la furgoneta. Fue en esta maniobra cuando el joven británico, de 28 años y sin carnet de conducir, embistió al todoterreno del Instituto Armado.

El impacto fue brutal. El vehículo patrulla dio varias vueltas de forma lateral y cruzó la mediana, acabando en uno de los carriles de la autovía en dirección Granada. Estaba totalmente destrozado debido al siniestro. Por su parte, la furgoneta quedó volcada en el arcén que separa los dos sentidos de la A-7.

Tras el siniestro, los agentes que seguían al sospechoso no tardaron en arrestarle, algo que no fue tarea fácil, ya que el conductor de la furgoneta intentó huir a pie de la zona y ofreció una gran resistencia durante su detención. De hecho, llegó a lesionar a dos guardias civiles más en ese momento.

Los agentes procedieron también a auxiliar a sus compañeros mientras llegaban los servicios de emergencias. Los sanitarios se encargaron del traslado hasta el Hospital Comarcal de la Axarquía de los dos guardias civiles en prácticas, un chico y una joven de 25 años de edad, así como del británico. Las fuentes sanitarias consultadas han explicado que los tres ingresaron con politraumatismos en las urgencias del centro. Pasaron por observación, donde se les realizaron diversas pruebas médicas, aunque finalmente su estado no revestía de gravedad.

El peor parado fue el más veterano de los guardias civiles que iba en el coche patrulla, de 40 años. La gravedad de sus lesiones hizo que se solicitase un helicóptero para su traslado, que se produjo para llevarlo hasta el Hospital Regional de Málaga. Las mismas fuentes han precisado que se encuentra muy grave en la UCI del centro, con un fuerte traumatismo craneoencefálico.

Los agentes del Instituto Armado investigan las circunstancias en las que el sospechoso empotró el vehículo de la Guardia Civil, para determinar, entre otros aspectos, la velocidad a la que circulaba y la forma en la que impactó contra el patrulla. El joven británico está arrestado.