La Policía Local desaloja en La Palmilla la Tetería narcos, un local que organizaba timbas de póker con menores

La investigación nació, una vez más, en las redes sociales. Agentes especializados en rastrear Internet captaron varios vídeos donde se observaba un local clandestino en el que se llevaban a cabo timbas ilegales con apuestas. En las imágenes se apreciaba que algunos de los participantes eran menores y que no se respetaban las medidas preventivas impuestas por la pandemia del coronavirus.

Lo que no se veía era la ubicación del establecimiento. Las pesquisas policiales permitieron descubrir que estaba situado en el distrito de Palma-Palmilla, lo que dio paso a un dispositivo de vigilancia por parte de los agentes de paisano del Grupo de Investigación y Protección (GIP) de la Policía Local de Málaga.

Los investigadores observaron cómo los jóvenes que llegaban a la puerta del local avisaban por teléfono móvil a alguien que estaba dentro para que les abriera la puerta corredera y acceder al mismo. En una de esas maniobras, policías locales de paisano y uniformados entraron en el establecimiento para inspeccionarlo y sorprendieron en su interior a los clientes.

Según han confirmado fuentes policiales, había 13 jóvenes, de los cuales 10 eran menores de edad. Estaban jugando (y apostando) al póker. Los agentes intervinieron 90 euros que, supuestamente, habían sido recaudados en concepto de entrada y participación en la timba que se estaba celebrando.

Los policías locales también decomisaron dos maletines de fichas y cartas que se han remitido al Servicio de Juegos y Espectáculos Públicos de la Junta de Andalucía, y precintaron una máquina tragaperras que no contaba con permiso alguno.

Todos los asistentes fueron denunciados por incumplir las medidas contra la Covid-19, puesto que no llevaban mascarilla ni guardaban la distancia mínima de seguridad. También intervinieron una navaja y una defensa extensible a dos de ellos. Los policías locales remitieron cartas a los padres de los menores para informarles de los hechos y enviaron un oficio dando cuenta de lo sucedido a la Fiscalía.

Los agentes identificaron al supuesto responsable del establecimiento, que fue denunciado por carecer de la documentación necesaria para la actividad comercial y también por no respetar las medidas preventivas contra el coronavirus al no exigir el uso de mascarillas y distancia, así como por permitir el consumo de cachimbas.

A la vista de lo anterior, los policías locales desalojaron y precintaron el establecimiento, al tiempo que advirtieron a su responsable de la obligación de cesar la actividad y de las consecuencias que podría acarrear el hecho de reanudarla.