Manifestación en Casabermeja para condenar el ataque con ácido, el pasado jueves. Salvador salas

«Estamos aliviados de que el Melillero ya no esté en la calle, ahora lo importante es la salud de Sandra y Cristina»

El alcalde de Casabermeja y familiar de una de las víctimas agradece el trabajo policial y dice confiar en la Justicia para que el sospechoso pague por el crimen

Sábado, 16 de enero 2021, 12:31

Han sido cuatro días de tensión durante los que el teléfono de José María García no ha dejado de sonar. Periodistas y autoridades han contactado con el alcalde de Casabermeja –y familiar de una de las víctimas del ataque con ácido– a cualquier hora ... del día, de madrugada o al amanecer. Pero anoche llegó la llamada más esperada: el subdelegado del Gobierno en Málaga, Teófilo Ruiz, informó de primera mano al regidor de la detención de José Arcadio D. N., 'El melillero', tras cuatro días de huida en la provincia de Málaga.

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García explica a SUR que, una vez recibió la llamada (que fue sucedida por las de otras administraciones que iban dándole más información), se puso en contacto con los familiares de Sandra, vecina de Casabermeja y exnovia del detenido. El entorno cercano de la joven se encuentra desplazado a Sevilla, donde está ingresada en la Unidad de Grandes Quemados de Andalucía, y desde allí transmitieron al alcalde su satisfacción por la noticia del arresto. «Estamos aliviados de que 'El melillero' ya no esté en la calle, ahora lo importante es la salud de Sandra y Cristina», remarca el alcalde.

La detención del sospechoso permite a los familiares de las jóvenes centrarse en su plena recuperación. El regidor hace hincapié en la tranquilidad que supone la captura del 'melillero', porque ahora saben «que no puede seguir causando situaciones similares».

La agresión a las dos jóvenes ha despertado una ola de indignación en la provincia de Málaga, especialmente en Cártama –donde vivía Cristina y donde tuvo lugar el ataque– y en Casabermeja. En ambos municipios se han llevado a cabo actos de repulsa a la violencia machista. El último fue en el pueblo bermejo, donde amigos y familiares de Sandra dijeron estar «indignados» por la situación.

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